Osman Rojas | LA PRENSA.- Con un cuchillo enterrado en la cabeza, acompañado por su hermana menor y haciendo la puñeta fue bajado de la ambulancia Alexander Javier Mendoza Artiaga en el Hospital Central. Este hombre de 23 años llegó al centro médico luego de ser herido por un menor de 17 años mientras se encontraba en una fiesta en Yaritagua, estado Yaracuy en la madrugada de ayer.
Fuentes que investigan este caso informaron que Alexander Javier fue apuñalado en una presunta venganza. El pleito empezó porque el hermano de Mendoza, supuestamente, le propinó un tiro al papá del atacante y éste se desquitó con un cuchillo de cocina.
“Se quería cobrar lo que le hicieron al papá y la pagó con el primer miembro de la familia Mendoza que encontró”, dijo una de las fuentes del Cicpc de Yaracuy que maneja el caso.
Luego de la puñalada, el atacante salió corriendo y Mendoza fue auxiliado por sus amigos quienes buscaron un carro y trasladaron al herido hasta el Antonio María Pineda de Barquisimeto.
Mendoza llegó consciente al centro médico, pero con el cuchillo clavado en su cachete izquierdo.
Según los médicos tratantes, el cuchillo atravesó uno de los nervios de la cara y es necesaria la realización de una tomografía en el rostro para operar y extraer el arma sin dañar la motricidad del paciente.
El menor autor de la puñalada ya fue detenido por los funcionarios del Cicpc y se encuentra a la orden de una Fiscalía del Ministerio Público. Sobre el hermano de Mendoza, quien fue el que aparentemente accionó el arma, los “petejotas” lo andan buscando.