EFE | LA PRENSA.- El huracán Matthew que arribó a costas estadounidenses el jueves cuando se aproximó a Florida, empezó a alejarse de las zonas costeras con el saldo de por lo menos 19 muertos, poderosas inundaciones y cientos de miles de viviendas electricidad.
El último recuento de fatalidades a causa del paso de Matthew dado a conocer hoy por las autoridades estatales revelan que se han registrado hasta el momento 8 muertes en Carolina del Norte, 6 en Florida, 4 en Georgia, y una en Carolina del Sur.
Aunque Matthew se alejaba esta mañana de las zonas costeras de EE UU, en un trayecto hacia el este, algunos vientos con fuerza de huracán azotan la larga barrera de islas de Outer Banks de Carolina del Norte, estado que sufre las consecuencias de inundaciones y falta de energía en más de 800.000 hogares y comercios.
El gobernador de este estado, Pat McCrory, confirmó la muerte de ocho personas, muchas de ellas relacionadas con las inundaciones ocasionadas por la marejada ciclónica, además de las acumulaciones de lluvia, que en algunas zonas ha llegado a 16 pulgadas (40 centímetros).
“Es todavía una situación extremadamente peligrosa para Carolina del Norte”, señaló en rueda de prensa McCrory esta mañana, tras anunciar que se espera que grandes ríos se desborden en las próximas horas por el paso del ciclón, cuyo ojo tocó tierra este sábado en la localidad de McClellanville, en la vecina Carolina del Sur.
Según McCrory, los equipos de auxilio acuático han realizado entre el sábado y domingo más de 900 rescates, de los cuales 562 se efectuaron en el condado Cumberland, área que registra importantes inundaciones.