Euseglimar González | LA PRENSA.- Granada los sorprende. Funcionarios de la Dirección de Inteligencia y Estrategia Preventiva (DIEP) de Polilara detuvieron ayer a una pareja de esposos tras encontrarle una supuesta granada fragmentada; escopeta y máquinas de coser industriales que habían sido robadas.
Luis Alexander Pacheco Díaz (35) y Marianela Sánchez Ocanto (37) fueron detenidos en el sector III de Moyetones por el delito de porte ilícito de arma y aprovechamiento de cosas provenientes del delito.
Se conoció que a las 11:30 de la mañana, los funcionarios estaban en labores de inteligencia en la Circunvalación Norte en busca de delincuentes que mantienen azotadas a las comunidades aledañas. Cuentan que cuando los funcionarios entraron al sector III vieron a un hombre sentado en el porche de una casa y estaba manipulando una escopeta. Le dieron la voz de alto pero, supuestamente, el hombre salió corriendo y se metió a la casa.
Los policías entraron hasta la casa en busca del hombre y lograron capturarlo. Comenzaron a inspeccionar la vivienda y dentro de un baño consiguieron una presunta granada fragmentada y cuatro máquinas industriales de coser que, aparentemente, fueron robadas al Consejo Comunal de Las Tinajas. Relatan los funcionarios que al ver la granada se paralizaron, pues no podían manipularla, tuvieron que llamar al Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) para que acudiera a la comunidad y la retiraran.
Tras unos minutos, los expertos en explosivos del Sebin llegaron, observaron el arma de guerra y la envolvieron en un material amarillo hasta montarla en la patrulla. A los vecinos de la comunidad les pidieron que se alejaran de la zona, por tratarse de algo peligroso.
Se conoció que la supuesta granada sólo era un facsímil tipo yesquero. Los detenidos quedaron a la orden de la Fiscalía Décima del Ministerio Público.
“Gente trabajadora”
Vecinos del sector comentaron que las dos personas detenidas son muy trabajadoras y colaboradoras con la comunidad. “Si tienen un arma de fuego está bien, es una manera de resguardarse. Aquí se tienen que cuidar porque hay muchos malandros, además a ellos los han robado tres veces”, soltó una vecina.
Relataron que cuando los funcionarios entromparon en la vivienda los vecinos salieron en su defensa, pero se frenaron porque los policías les dijeron que no se metieran.