Los candidatos presidenciales tienen tres semanas para convencer al país con sus propuestas de cara a los comicios del 28 de julio
Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- A partir del 4 de julio en Venezuela inicia una campaña electoral bastante corta, de sólo 22 días. Según analistas políticos los comicios están polarizados entre los candidatos Edmundo González Urrutia, de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), y abanderado de María Corina Machado, líder de la oposición, que recorre el país intentando conectar con la esperanza, y el candidato Nicolás Maduro, que busca su tercer mandato, siendo la primera vez en la historia que el PSUV va a una contienda electoral con índices de popularidad bajos, según las encuestas más serias.
Para Eglée González Lobato, consultara político-electoral, lo que se vio en la precampaña fueron pocos argumentos de parte de las dos tendencias políticas para dar a conocer un plan de gobierno. «No se está hablando de programas o de proyecto país, de qué piensan en un futuro cercano o a mediano plazo los candidatos. Se está haciendo una campaña muy personalizada», alega.
Considera que la escena pública la ha dominado María Corina Machado, que está inhabilitada para ejercer cargos públicos, pero es la que ha recorrido el país pidiendo votar por González, en un escenario donde por primera vez la oposición tiene a su favor la unidad de los partidos, algo que no ocurría desde 2013. Y además, sondeos de opinión como los de Delphos, señalan que el 85% del país demanda cambios políticos.
«Siento que hay una campaña que la dirige Machado más hacia tratar de conquistar esos grupos de electores que tienen un drama. La campaña es un drama, no es una campaña llena de esperanza, de alegría, de futuro. Es una campaña dirigida a despertar esa emoción basada en la frustración, el dolor por la separación de las familias», sostiene González Lobato.
Cataloga de error que hasta ahora, el candidato de la MUD, haya realizado tan pocos recorridos al interior del país, en estados como Aragua, Miranda, La Guaira y Bolívar. «Me gustaría ver mayor fortalecimiento del candidato», sugirió.
Analizando el Gobierno, sostiene que han cometido varios errores, el primero tiene que ver con hacer movilizaciones en los mismos lugares que ha visitado Machado, y el segundo, en aplicar represión al cerrar hoteles, restaurantes, confiscar equipos o aplicar detenciones arbitrarias a personas que prestaron algún servicio a la oposición o a dirigentes relacionados con Vente Venezuela.
«El oficialismo hace una campaña con un enfoque equivocado porque ha ido como persiguiendo a quien en este momento goza de una preferencia que es Machado. Hay que rechazar esa manera en cómo han cerrado locales comerciales y han afectado a la gente más humilde, como cuando el Seniat cerró un local de empanadas de dos mujeres en Guárico, el 23 de mayo», comunicó.
Doriam González, politólogo, considera que el discurso de Machado está canalizando el resentimiento de una parte de la sociedad, hacia la esperanza. «Su discurso es una promesa para que vuelvan los hijos, se reúnan las familias, una lucha espiritual. Es sacar a los que se sienten frustrados y agregarle elementos relacionados con la esperanza», alegó.
En cuanto al oficialismo, cree que Maduro y voceros del PSUV, como Diosdado Cabello, se ha basado en generar miedo y alentar la desmovilización del voto opositor.
«El chavismo trata de enfocar su campañas sobre la base del miedo. Por un lado le dice a su base política que van a perder su identidad porque los van a perseguir si gana la oposición, que van a perder los beneficios sociales que el chavismo considera como logros. Además tiene otro componente dirigido hacia la oposición que es todo lo que vemos del abuso de las instituciones en contra de líderes políticos», explicó.
Intentan nueva fórmula
El politólogo Horacio Zavala, sostiene que el Gobierno trata de mantener en su campaña la imagen del fallecido Hugo Chávez, para llegarle a un reducto de su militancia que es leal al legado del expresidente. «Buscan convencer a ese chavista furibundo que hoy cree que Chávez se equivocó al escoger a Maduro, o que siente que Nicolás Maduro se ha apartado de la ideología o el legado chavista», apuntó.
Señala que entre las propagandas audiovisuales que ha desplegado el Gobierno por redes sociales y medios de comunicación, han apelado a la «fórmula del Gallo Pinto».
«Han hecho una humanización del gallo para hacerlo parecer a Maduro. Buscan sembrar la idea que él es el presidente es ágil, fuerte, mientras el denominado gallo pataruco, refiriéndose despectivamente al candidato opositor, Edmundo González, es el gallo cobarde, débil. Eso basado en la idea de que mucha gente puede estar pensando en que, como la que habla y recorre el país es María Corina Machado, ella es la que va a mandar si gana la oposición. Edmundo González se ha dado el lujo de salir muy poco de gira, el oficialismo hace creer que esta demasiado viejo, cansado para hacer esfuerzos físicos», mencionó.
Argumenta que al contrario de María Corina Machado, que se ha visto abrazando niños, mujeres mayores, señores llorando en esta precampaña, y la escoltan centenares de motorizados en su recorridos por los pueblos de Venezuela, las encuestas están señalando que el presidente Nicolás Maduro se ve como un candidato distante a la gente.
«El presidente Maduro trata de acercarse a la gente simbólicamente, por eso baila, se ha dejado grabar sobre el capó de un carro, pero no es un líder carismático», comentó.