Habitantes de la urbanización afirman que el problema tiene dos años
Jhonny Pérez | LA PRENSA DE LARA.- El día a día de los vecinos de la Urbanización Colinas de Santa Rosa, específicamente en la carrera 7 con calles 1 y 1 A de Santa Elena, transcurre entre la maleza, desbordamiento de aguas negras y basura en las calles, viéndose afectadas por este problema unas 15 familias.
Es casi imposible caminar por la calle que une a la urbanización con el parque Las Colinas, el cementerio de Santa Elena, la iglesia La Consolación y la avenida principal de la urbanización, pues los malos olores y la abundancia de maleza obliga a los vecinos a tomar otras calles para ir a sus destinos.
«Estamos haciendo un reclamo y una exigencia a los organismos para que nos resuelvan el problema que tenemos desde hace dos años, que es la rotura de una tubería de aguas negras que desagua hacia el cementerio y el parque, ambos lugares activos y de concurrencia habitual de personas que vienen ya sea a visitar los difuntos o recrearse en el parque», detalló Molina.
«Los olores que percibimos en las noches y por las mañanas son insoportables, he denotado que hay mucha plaga como moscas, zancudos y roedores, este problema tiene mucho tiempo así y nadie hace absolutamente nada, como vecinos luego de que corpoelec cortara las ramas, nos organizamos para arrimarlas hacia las aceras; el monte ha crecido y la basura, que aunque se deja en el sitio indicado, los perros y los indigentes la riegan por todo el lugar», manifestó Paredes.
Los vecinos hacen un llamado al gobernador del estado Adolfo Pereira, de quien dicen reside a dos cuadras del lugar, y al alcalde de Iribarren Luis Jonás Reyes, para que brinden apoyo a esta comunidad ya que temen que ante la problemática se de una propagación de enfermedades en la piel, respiratorias y hasta casos de dengue.