Ana León | La Prensa.- Los precios de las verduras se disparan. El tomate aumentó de precio en menos de un mes. Pasó de estar de mil bolívares a 2 mil 500 bolívares. Vendedores del Mercado Terepaima aseguran que la época de lluvias contribuye al aumento del precio de los vegetales.
Para Petra Sánchez es muy difícil comprar los rubros cada semana, sobre todo ahora que llega la época decembrina y los precios de los ingredientes para hacer una hallaca están altos.
Todo está muy difícil últimamente. La situación del país ha hecho que los precios de todas las cosas aumenten diariamente. Yo estoy intentando comprar las cosas para mis hallacas de este año, pero he visto que está muy difícil adquirir algunos ingredientes”, comentaba Sánchez.
Los vendedores del mercado Terepaima también se las están viendo negras al momento de adquirir las cestas de tomates que necesitan para sus negocios.
“Una cesta de 20 a 22 kilos de tomates puede llegar a costar hasta 40 mil bolívares. Esto es demasiado caro”, decía Tony Duno, quien añadió que algunos negocios aprovechan las épocas decembrinas o las lluvias para tener la excusa de aumentar el fruto.
En esta época, algunos vendedores se aprovechan de las fechas para aumentar los precios. A veces dicen que el tomate está escaso, pero eso es mentira. Además que no puede caer una gota de lluvia porque sino se ponen a vender todo lo que tienen de la cosecha porque, según ellos, se pone mala”, indicó Duno.
Otra de las razones que admiten los vendedores para el aumento de los vegetales es que las semillas que traen ameritan ser pagadas en dólares porque son importadas.
Nuestras semillas son importadas. Sin dólares los trabajadores que nos surten no van a poder traer los rubros para la cosecha”, dijo Ángelo Ortega.
Otro de los vegetales y frutas que ha aumentado de precio en los últimos días son el pimentón y la zanahoria. Que pasaron de estar en casi 700 bolívares a costar mil y dos mil bolívares. Esta alza no tomó por sorpresa a consumidores y trabajadores de los mercados mayoristas y bodegones de la ciudad. Pues decían que estaban conscientes de que algo así podía ocurrir.