La tradición del Día de Muertos en México ha tenido como antesala un espectáculo visual y sensorial de los campos de flor de cempasúchil. Este viernes, los productores del municipio de Atlixco, en el estado de Puebla, comienzan a cortar las flores para llevarlas a todos los rincones del país y así poder, con su olor peculiar, llamar a las almas de vuelta a sus hogares.
El cempasúchil es uno de los íconos más importantes del Día de Muertos, que combina raíces indígenas, fe católica y creatividad popular de los mexicanos.


Esta flor endémica del país tiene forma especial y cuenta con alrededor de 56 especies en todo el territorio. Sin embargo, no pierde su esencia de exhibir más de veinte pétalos de colores amarillo, oro o naranja, con un olor penetrante que solamente se puede disfrutar en los meses de octubre y noviembre, con un singular periodo de vida de máximo cuatro meses.
Siembra y producción del cempasúchil en México
En largas jornadas y con un cuchillo curvo, los trabajadores cortan y eligen las mejores flores, aquellas que no estén maltratadas, cuyo objetivo será adornar las ofrendas o altares donde se coloca la comida y los objetos favoritos de las personas fallecidas a las que se honrará su memoria este fin de semana, como marca la tradición en el país norteamericano.
Luego de ser recolectadas, las flores son llevadas al mercado, donde llegan compradores de diferentes estados de la República, para negociarlas y cargarlas de inmediato en camiones que las transportarán por todo el país durante las festividades del 1 y 2 de noviembre.


Así lo explicó Lorenzo Díaz Ortega, productor de la zona, quien afirmó a EFE que este año en la región se sembraron más de trescientas hectáreas de cempasúchil, lo que garantiza el abasto. Explicó que «con toda la región entre cempasúchil hay más de 300 hectáreas, terciopelo (otro tipo de flor de temporada), son al rededor de 200 o 250 hectáreas, entonces es bastante flor la que se va a vender aquí en Atlixco como cada año».
Además, Díaz Ortega mencionó que cada año es mayor la demanda, dado que se suman más compradores que llevan la flor a estados del norte y sur del país: «vienen de Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Tlaxcala, un comprador muy fuerte es Hidalgo, que es el que más flor se lleva, y han venido de Sonora, Zacatecas, Colima, Durango y Quintana Roo».


Según datos de las autoridades estatales, Puebla se posiciona este año como líder en producción de cempasúchil y terciopelo al concentrar un 72 % de la producción nacional.
Con información de EFE.


