Sosa/Díaz/Orozco | La PRENSA.- Un colapso vial se registró en horas del mediodía de este viernes en la carretera Centroccidental, en los límites de los municipios Torres y Jiménez, luego que un cerro se derrumbara producto del fuerte aguacero que cayó sobre Lara.
A eso de la 1:00 pm conductores quedaron atrapados en una descomunal cola mientras esperaban que autoridades retiraran los sedimentos que obstaculizaban el paso. La tranca se agudizó debido a que dos gandolas estaban accidentadas cerca de donde ocurrió el incidente que dejó a ambos municipios incomunicados por un breve período.
Las precipitaciones registradas ayer también causaron caos, aunque en menor intensidad, en los municipios Iribarren y Palavecino, cuyos habitantes reportaron calles anegadas a través de las redes sociales. Sin embargo, el parte bomberil indica que no hubo zonas afectadas pues luego que cesaron las lluvias, el nivel del agua bajó con rapidez.
Temen una desgracia
Ante la llegada de las lluvias, iribarrenses manifestaron su preocupación ante posibles desbordamientos de quebradas y canales.
La acumulación de basura, escombros y piedras en los cauces mantienen en vilo a vecinos de los sectores La Lucha, Ruezga Sur, San Jacinto, Dren X y El Jebe, quienes elevan plegarias de misericordia cada vez que caen algunas gotas de agua.
“Cuando llueve corre el agua fuerte por la quebrada, arrastra mucha basura, piedras y escombros. Ni la Alcaldía ni la Gobernación vienen a hacer trabajos de limpieza” soltó Yoelis Sivira, residente de La Lucha.
Alí Blanco, habitante de la Ruezga Sur, comenta que cuando llueve el nivel de la quebrada sube, se forman barrancos y se originan deslizamientos de tierra.
“Siento temor porque así como arrastra objetos, puede llevarme a mí también; en ocasiones, se han deslizado muchas casas, además la tierra está muy suave, no podemos caminar por el lodo porque nos podemos caer”, exclamó.
Por su parte, el presidente de Imaubar, Miguel Rojas, señaló que durante enero se han estado realizando diversos mantenimientos a las quebradas para lo cual se han desplegado tres cuadrillas. “Hemos limpiado 15 quebradas en Iribarren pero el plan incluye a 40”, aclaró.
“Los habitantes generalmente originan su propio problema al contaminar y obstaculizar las quebradas con basura y escombros”, señaló Rojas.