William Croes.- La escasez de comida encendió varios puntos del país. En Yaritagua, Barquisimeto y Carabobo se armaron soberanas revueltas. Pedían que las bolsas de comida se entregaran con mayor eficiencia. El plan de abastecimiento casa por casa comenzó con el pie izquierdo.
El primer candelazo se produjo en Yaritagua, municipio Peña. Los habitantes de 20 comunidades trancaron la autopista Cimarrón Andresote por cuatro horas. Argumentaron que las bolsas de comida le llegaron infladas y con productos descompuestos.
Antonieta Colmenárez, una de las habitantes que participó en la protesta, señala que el consejo comunal le había dicho que la bolsa costaría 800 bolívares.
“Nos las cobraron entre mil 600 y 3 mil bolívares. De paso, no trajo pollo ni carne de res; sólo cuatro pedacitos de pescado que olían como si estuvieran descompuestos. Las bolsas de arroz y la pasta vinieron con coquitos adentro”.