Lorena Rojas | LA PRENSA DE LARA.- La poca demanda del producto nacional, el exceso de los tributos fiscales, la falta de financiamiento, la competencia de productos importados y la precariedad en los servicios básicos son cinco factores que impiden que las industrias en el país puedan aumentar sustancialmente su producción. Los datos fueron revelados en el informe de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), tras los resultados de la Encuesta Cualitativa de Coyuntura Industrial del II Trimestre del 2022, que fue aplicada a un aproximado de 2 millones de empresas.
Esta encuesta precisó que durante el segundo trimestre, la capacidad instalada de las empresas aumentó a 31%, es decir, tres puntos porcentuales más que el primer trimestre, donde se ubicó en 28%.
Luigi Pisella, presidente de Conindustria, aseguró que los cinco factores detallados en los resultados del estudio afectan directamente la producción de las empresas y que hasta el momento los esfuerzos que se están realizando en materia económica en el país no han sido suficientes.
«Estos factores impactan a la industria, el gran problema que seguimos teniendo es el poco poder adquisitivo de nuestra gente, aún cuando se ha aumentado, lo decimos una vez más, no ha sido suficiente a donde hemos llegado. Tenemos que seguir incrementando la remuneración de nuestra gente, pero para ello es necesario que produzcamos mucho más y sobre todo que seamos productivos», indicó. Pisella precisó que un 76% de los encuestados están siendo afectados por la poca demanda nacional.
En el caso de los excesivos tributos fiscales y parafiscales, el 74% contestó que sería el segundo factor que más los aqueja, por lo que requieren una «armonización» que permita que todos puedan contribuir con los impuestos y así poder ser más competitivos.
El tercer factor que se muestra en el estudio es la falta de financiamiento que hay en el país, pues en la medida que se aumente la producción será necesario financiar el capital de trabajo. «Ese financiamiento es fundamental para nosotros, porque las inversiones que se están realizando actualmente son netamente de materia prima y de mantenimiento de equipos», dijo, por lo que aseguró que no se estarían generando muchos empleos.
La competencia de los productos nacionales con los importados es el cuarto factor, pues un 55% de los empresarios respondió que estos están siendo más demandados por los consumidores. «Hemos dicho que no estamos en contra de los productos importados, estamos en contra es de los productos importados terminados que ingresan al país y no pagan impuestos, mientras nosotros sí pagamos por la materia prima. Esto es fundamental para poder competir en igualdad de condiciones, para que así se refleje en empleo, en el poder adquisitivo y también en una mayor cantidad de impuestos… No se han aumentando las tasas que hasta ahora son una carga muy pesada de sobrellevar y que lo que hace es impulsar a la informalidad», dice.
Igualmente, señalan que un 43% de los encuestados respondió que sus operaciones han sido afectadas por la precariedad en los servicios básicos, los cuales habrían estado «mejorando», pero que aún no serían suficientes para llevar un ritmo de producción con normalidad.
El presidente de la organización resaltó que pese a que factores impidan la producción en las industrias, las mismas durante el segundo trimestre del 2022 vieron una leve, pero significativa mejoría, la cual estaría asociada directamente con la confianza que nuevamente se está generando en el sector privado, y además que no se está trabajando con tantas intermitencias como ocurrió en el año 2020, cuando la capacidad instalada en las empresas llegó a un 19%, por lo que estarían «encaminados» a tener mejores números en los resultados de las próximas encuestas que se realicen.
Salario promedio es de $150
El presidente de Conindustria, Luigi Pisella, explicó que según la Encuesta Cualitativa de Coyuntura Industrial del II trimestre del 2022, determinaron que el salario promedio de los trabajadores alcanzan los $150, lo que significa una mejoría.
«En promedio, la remuneración a nivel operativo de nuestros trabajadores se ubicó en $150, el trimestre anterior fue de $130, aquí vemos que toda la mejoría que tenga la industria va trasladada directamente a lo que es la remuneración y recuperación de nuestros trabajadores», dijo.
Señaló que la Gran Empresa sería la que mejor está cancelando sueldos, pero que las medianas y pequeñas empresas no se estarían quedando atrás con los pagos. «A pesar de que el incremento de las ventas no ha sido notorio, la pequeña industria aumentó un 61% sus remuneraciones», dijo.