Organizados de distintas formas para embellecer sus comunidades, vecinos de seis sectores de Barquisimeto han creado pequeñas plazas y huertos comunitarios que facilitan la recreación y la socialización, valiéndose de recursos propios para acondicionar estos espacios.
Las Delicias, Los Crepúsculos, Ruiz Pineda II, la calle 38 con avenida Ribereña, avenida Los Horcones y Santa Isabel son muestras de ese aprovechamiento de la autogestión que les ha permitido la recuperación de áreas públicas y la elaboración de pequeños cultivos, donde se siembran plantas medicinales y frutales para la misma comunidad.

Silvia Silva, vecina del sector Las Delicias de la parroquia Unión de Barquisimeto, detalló que desde que comenzó a dedicarse al comercio informal en el año 2006, vio en la actual parada de transporte público de la zona un lugar que podía servir como plaza.
“Antes de hacer la plaza, esto estaba abandonado, abundaba el monte y la basura, comencé a limpiar y así poco a poco con ayuda de los demás vecinos, hemos mejorado el área. Entre todos hemos colocado bancas y hemos sembrado algunas plantas”, señaló Silva.
En Los Crepúsculos el reto fue mayor, puesto que el lugar al que han denominado el “Conuco de Bonilla”, nació para revertir un vertedero de basura que se estaba creando entre las casas y la cancha. Enrique Bonilla, vecino del sector, explicó que poco a poco han ido acondicionando el espacio en el que todos los días los vecinos muestran interés en mantenerlo limpio.
“Se comenzó con un plan de limpieza porque estábamos cansados de la basura y un día unos vecinos y yo dijimos: ¿y si comenzamos a sembrar para educar a la gente? y así lo hicimos, iniciamos con unas tres plantas de aguacate, seis de cambur y plantas medicinales.
Luego nos propusimos en hacer un mesón y algunos asientos logrando tener esta placita para jugar dominó, conversar y compartir entre vecinos”, detalló Bonilla.
Según cuentan los responsables de estas áreas, cada vecino ha aportado dinero o materiales para mantener el espacio y con ello lograr embellecerlo. Actualmente se han esforzado para instalarle luz eléctrica, para que en las noches no queden en penumbras.
Celso Méndez, vecino de Ruiz Pineda II, dijo que los residentes se han organizado para hacer en el lugar áreas para el esparcimiento, contando con el apoyo de todos. Gracias a eso, se creó una cancha de bolas criollas y un sitio comunitario donde los domingos los vecinos se reúnen para hacer sopa y compartir. “No hemos recibido apoyo de nadie, todo ha salido gracias al esfuerzo de tantos vecinos que de diversas maneras han contribuido, ya sea en la creación de este paseo, como también en su mantenimiento”, destacó.
La misma acción se replica en la avenida Los Horcones, en el que un pequeño conuco vecinal se ha levantado en la isla de la vía y en la 38 con Ribereña con la creación de una plaza.