Euseglimar González | LA PRENSA.- Durante la mañana de ayer, usuarios de Central Madeirense y Garzón se alborotaron porque no pudieron comprar comida. Apuntaron que en los depósitos de los supermercados aun quedaban productos.
En el Central Madeirense de Valle Hondo en Palavecino se amotinaron, cuando los trabajadores le dijeron que solo venderían papel higiénico y jabón en polvo. En ese momento se formó un bululú y los usuarios comenzaron a gritar y exigir la venta de aceites, mayonesa y harina de trigo, que según había en los depósitos.
Saquen todos los productos, aquí hay comida hasta para tirar al techo», gritaban los clientes.
La gerencia del supermercado decidió llamar a los militares para que controlara la situación en las afueras del establecimiento, pues había más de 300 personas. Adentro hay comida pero no nos quieren vender porque los trabajadores bachaquean la comida y venden los combos en 30 mil bolívares‘, señaló Carolina Bastidas, mientras esperaba len la cola.
Dos camiones del Ejército llegaron con más de 30 militares, quienes comenzaron a organizar a los clientes. Hicieron un cordón de seguridad en el área de la entrada al establecimiento.
A las 11:00 de la mañana continuo la venta después de una hora paralizada y solo vendieron jabón y papel, trabajadores insistieron que era ‘lo único‘, que tenían a la venta.
En otro punto pero en Garzón se presentó algo similar, al medio día los usuarios fueron informados que no iban a vender más productos porque se había terminado todo. Esa situación hizo explotar a las personas y exigían que les vendieran el azúcar y harina que habían llegado ayer a las 6:00 de la mañana.