LA PRENSA.- El médico alemán Peter Platz analizó cómo fluctúan los biorritmos femeninos y masculinos durante el día, y señaló los momentos en los que ambos coinciden, haciendo de esos horarios los mejores para hacer el amor.
Según el especialista en sexualidad a las 9:00 de la mañana, las endorfinas femeninas están a su máximo nivel, y en el hombre hay un 50% más de testosterona: la combinación perfecta.
Llegadas las 04:00 de la tarde, las curvas del deseo de ambos sexos se hallan en plena coincidencia. Resultado: una sesión de sexo intensa, efectiva e incluso más larga.
Por el contrario, a la noche el romanticismo de las penumbras queda desarmado ante el aumento de la melatonina (hormona del sueño) en la dama, y el relajo del caballero.
Con información de Revista Buena Salud