Euseglimar González| LA PRENSA.- El paludismo sigue asechando en Bolívar y entre sus víctimas se encuentra un guaro. Hace cinco meses Jhonny Alberto Mendoza Vargas (37) fue trasladado desde la cárcel de Fénix en Lara hasta El Dorado. Familiares denuncian que estando en San Félix fue que se contagió de esa enfermedad y de tuberculosis.
Un allegado a la familia Mendoza Vargas contó que Jhonny comenzó a descompensarse poco a poco y presentó fiebre. Está delgado, sus pulmones infectados y le diagnosticaron paludismo. Ahora se encuentra recluido en un hospital en San Félix en estado crítico.
“Los doctores no dan esperanzas de vida, está grave. La familia trató de pedir ayuda al Ministerio Penitenciario para que lo trasladaran a Lara y ellos poder atenderlo como era debido, pero no lo lograron”, cuenta el allegado.
Cuentan que el recluso llevaba más de cuatro meses con la enfermedad. Detallan que en una de las primeras visitas de la mamá ella lo notó enfermo y presuntamente se lo informó al director de la cárcel y este le dijo que el muchacho tenía paludismo, pero que en el recinto no contaban con los medicamentos.
Desde ese momento la madre comenzó a gestionar y pedir al Ministerio que trasladaran de nuevo hasta Lara a Jhonny, pero no fue posible.
“‘Hace poco entre las madres tuvimos que hacer una colecta y darle dinero para que pudiera viajar. El muchacho de verdad que está muy grave”, sostuvo el allegado.
Los familiares de los otros reos le dieron más de un millón de bolívares que lograron recoger entre varios y con ese dinero ella logró viajar hasta San Félix en donde está recluido el privado de libertad.
Jhonny fue uno de los 240 reos que fueron trasladados en julio, luego del motín que se formó en esa fecha en donde resultaron dos detenidos quemados y dos muertos por heridas de bala. Él cuando fue trasladado presentaba una herida en la pierna, que no fue curada en su momento.
“Sólo llevaba esa herida, pero no tenía tuberculosis ni paludismo”, sostuvo el conocido.