Familiares de privados de libertad denuncian que para ingresar un kilo de alimento tienen que llevar el doble
Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- El 2 por 1, presuntamente, existe en las cárceles de Venezuela, pero no para una oferta que beneficie al consumidor sino a terceros, familiares de privados de libertad denuncian que para poder ingresar un kilo de alimento tienen que llevar el doble, pues esa es la «forma de pago» para el custodio.
«Una señora iba a pasar un jamón empaquetado y el custodio le dijo: si trajiste dos pasa la bolsa, sino no. Esta corrupción no es nueva, pero últimamente están pasados, juegan con la necesidad del familiar», sostuvo una joven que estaba afuera de la Comunidad Penitenciaria Fénix Lara.
Para los familiares de reclusos de los penales como Fénix y el Centro Penitenciario David Viloria, mejor conocido como cárcel de Uribana, la corrupción no ha cesado, pues denunciaron que desde adentro existe un «mercado» del que se dice que incluye desde los reclusos hasta los custodios penitenciarios.
Este jueves, un grupo de mujeres estaba en los alrededores de Fénix, algunas con bolsas de comida preparada y otras a la espera de transporte público para retornar a sus casas. A diario se observa a estas damas caminando largos trechos hasta llegar a las cárceles y poder llegar a tiempo para que les reciban los paquetes.
Las necesidades de los reos no son cubiertas por el Estado y son las familias, casi sin recursos, quienes deben proveerles ropa, comida y alimentos.
«Si tu llevas un mercado de 20 dólares los custodios no te lo van a dejar entrar, sólo lo hacen si el detenido tiene dieta por orden médica, pero si llevas dos mercados con la misma cantidad de víveres, eso pasa como Shakira «sorda, ciega y muda», aseguró la esposa de un preso, quien por temor a represalias no se identificó.
Las mujeres denunciaron que esto no sólo ocurre con alimentos sino también con celulares, aunque este «ingreso» es más costoso, pues si entra un móvil deben llevar dos, supuestamente, con uno se queda el guardia penitenciario.
Las ONG como el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) y Una Ventana a la Libertad (UVL) han denunciado por años la corrupción en los penales, no solo en Lara sino en todas las cárceles del país.
Presos venden comida preparada
El negocio se ha expandido dentro de los penales. Familiares contaron que en las cárceles de la entidad larense los presos preparan alimentos y se las venden a otros detenidos, que mayormente tienen familiares fuera del estado y se les complica llevarles la paquetería.
Hay una variedad de precios, detallaron que cuestan entre 5 hasta 10 dólares.
«El más barato es el tobo de sambumbia, que es una liga de verduras, pollo picado, carne, arroz o pasta. Esto sale en 5 dólares y les puede durar hasta dos días», dijo un familiar.
El hambre es un negocio, dicen los familiares y es porque aparentemente los penales les dan pocos alimentos en los menús, detallaron que dan un pedazo de auyama y como jugo, panela con limón.