Lorena Rojas | LA PRENSA DE LARA.- Junior Peña o mejor conocido como el payaso Pipo Junior va a cumplir dos años el 27 de octubre llevándole sonrisas a los más pequeños con su gracia a través de sus shows.
Este personaje que se formó en Colombia no le ha sido fácil trabajar en medio de la pandemia, ya que los eventos públicos y las fiestas fue lo primero en prohibirse por lo que tuvo que reinventarse haciendo shows por redes sociales y así mismo algunas paradas comerciales de negocios en semana de flexibilización siempre respetando las medidas de bioseguridad.
Con motivo a estos dos años que va a cumplir el personaje de Pipo Junior el 27 octubre quiso contar su historia de como comenzó su travesía de payaso siendo emigrante.
Peña resalta a él siempre le había gustado la recreación, más nunca se imagino que con su energía podía llegar a animar una fiesta o un evento con chistes y trucos.
«Me formé primero como recreador y luego cuando me fui a Colombia empecé con mi formación como payaso, hice muchos cursos para aprender«, dice, destacando que una de las cosas más difíciles de su oficio es el siempre mantener una sonrisa y alegría pese a no estar teniendo un buen día.
Junior resalta que el formarse como payaso en Colombia no fue nada sencillo, el ser reconocido en un país extranjero es todo un reto, aún recuerda como una persona que lo vio en el parque le ofreció su primera contratación.
«Tenía que tener mucho cuidado de no decir mal una palabra que las personas las pudiesen la pudiesen distorsionar», comenta.
Así mismo asegura que sus shows están centrados en el rescate de los valores.
«Lo que busco en mis presentaciones es que los niños se puedan distraer y que le vean otra cara a la situación», menciona.
Fiel creyente de Dios
Junior Peña ha puesto sus ojos en Dios y no pierde la esperanza de que todo mejor.
«Si uno tiene fe todo se hace realidad y los sueños se cumplen», manifestó.
Es por eso ha regalado a múltiples eventos de iglesias y fundaciones sus servicios para hacer reír a los más pequeños.
Cuenta que Dios nunca lo ha dejado solo, pues una vez fue a un taller donde habían varias personas formándose y el no contaba con el dinero suficiente para adquirir todos los productos y solo compró lo que pudo, pero tras recibir una llamada recibió una gran sorpresa.
«El payaso que estaba dictando el taller me llamó y me regaló una maleta con todo lo que necesitaba para poder trabajar, maquillaje, vestuario entre otras cosas», finaliza.
El payaso Pipo Junior por redes sociales se puede encontrar como @payasopipojr para conocer más acerca de su trabajo.