Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- Los celos y la ira lo cegaron hasta que se convirtió en asesino. Una adolescente de 17 años, hija de un pastor cristiano, fue asesinada por un hombre que entró a su casa sigiloso y le dio un machetazo. La muchacha estaba sentada frente al televisor de su casa, ubicada en el caserío Barranca, vía Laguneta del municipio Morán.
La noche del 5 de junio de 2019, los gritos desgarradores de una mujer alertaron a los vecinos del caserío, no sabían qué pasaba, asustados salieron ver qué ocurría, observaron a una muchacha llorando desesperadamente, mientras era abrazada por su esposo. Cuando se acercaron para saber qué pasaba, la dama les dijo que su hermana de 17 años había sido asesinada.& ;
A la adolescente le dieron un machetazo en el cuello. El cuerpo de la joven estaba sentado en la silla frente al televisor, en su mano izquierda sostenía el control, el codificador del Directv y la pared quedó con chispas de sangre.& ;
«Mataron a la hija del pastor», era lo que se comenzaba a correr por todo el caserío, al mismo tiempo que se preguntaban ¿por qué? ¿quién era capaz de hacer eso?.& ;
La casa estaba tal cual como la dejaron sus padres, quienes ese día se trasladaron hasta El Tocuyo, pues harían unas diligencias, por lo que descartaban el robo como el móvil.& ;
Poco tiempo después llegaron los padres de la menor, estaban destrozados por su muerte. Por lo lejos que queda el caserío a los familiares se les imposibilitaba llamar a los cuerpos de seguridad para que hicieran el levantamiento del cuerpo.& ;
Fue al día siguiente que los funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc llegaron a la escena del crimen, al entrar lograron observar que en el medio de la sala estaba el cuerpo. Los uniformados comenzaron hacer las experticias e interrogatorios para comenzar con las investigaciones. El Cicpc hizo el levantamiento del cadáver y fue llevado a la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda en Barquisimeto.
La hija del pastor
Ya la noticia había corrido por todo el caserío habían matado a la hija del pastor evangélico de la iglesia la Luz del Mundo.
Los habitantes del caserío al conocer sobre la muerte de la menor, comenzaron a dar varias versiones sobre la joven, unos decían que a la muchacha la había matado un hombre que estaba obsesionado con ella.
Iniciaron las entrevistas por parte de los funcionarios del Cicpc y comenzaron con su entorno familiar. Primero con la hermana de 19 años, quien fue la que la vio muerta, luego el cuñado (pareja de su hermana) y los padres. Los uniformados siguieron buscando testimonios para lograr dar con el paradero del asesino.& ;
La familia Dudamel (padres e hijas) llegó al estado Lara en el año 2010 y se instalaron en el caserío Barrancas, eran oriundos de Portuguesa, pero tras pasar unos meses en Lara decidieron quedarse para echar raíces.
Los padres solo pidieron a los funcionarios que buscaran al responsable del crimen, sabían que su muerte no fue por un robo y querían tener la verdad.
En el mismo círculo
El homicida estaba entre los familiares y conocidos. La casa no estaba violentada, no fue robada y a la víctima no la golpearon antes de asesinarla.& ;
Los padres de la joven lloraban desconsoladamente en la cocina de la vivienda, mientras que eran consolados por su hija mayor de 19 años y su yerno, de 22 años. Cada vez que el Cicpc llegaba al caserío ellos revivían la escena de cuando sacaron el cuerpo de la jovencita.
LA PRENSA pudo conocer para ese momento que los vecinos de la comunidad poca información aportaban, pues aseguraban que el día de la tragedia no lograron escuchar ruidos ni vieron a nadie ajeno a la familia.& ;
Crimen pasional
Los funcionarios del Cicpc descartaron el robo y la venganza como móvil del crimen, ahora estaban más seguros que se trataba de un crimen pasional. Para ese momento pensaban que el implicado no podía ser una mujer, primero por la herida que presentó la jovencita, pues el machetazo fue preciso y con fuerza.& ;
Una fuente policial detalló que esta hipótesis la terminaron de descartar cuando las experticias determinaron que la menor tuvo relaciones sexuales antes de su muerte.& ;
A la jovencita meses antes de su muerte, le había llegado unos mensajes de contenido erótico y ella le había contado a sus papás, una vez los funcionarios tuvieron esta información decidieron ubicar al responsable de los mensajes, quien aparentemente, les indicó que él le prestaba el celular a Luis Antonio.
Fue para ese momento en que volvieron a entrevistar a su entorno familiar. Luis Antonio Pérez Benítez de 22 años, cuñado de la víctima, fue uno de los que entrevistaron nuevamente.& ;
Fuentes ligadas al Cicpc contaron que el hombre mantenía su versión y que el día del crimen él no la había visto, pero los funcionarios comenzaron a sospechar del cuñado, para ese momento le hicieron más seguimiento a las versiones recogidas en el sitio para lograr esclarecer el femicidio.& ;
Lo quiso dejar
El día del crimen, la menor, presuntamente, mantuvo relaciones sexuales con Luis Antonio, quien era su cuñado y amante desde hace seis meses atrás. Lo que se supo para ese año, es que la jovencita le explicó a Luis Antonio que ellos no podían seguir la relación porque se sentía mal en hacerle eso a su hermana y además ella había regresado con su novio.
Luis, presuntamente, les confesó el crimen a los detectives. Antes de ser detenido el hombre pidió hablar con el padre de la joven, quien es pastor evangélico.& ;
Cuando el pastor llegó hasta donde él estaba, Luis lo miró a los ojos y le pidió perdón por lo que le hizo a su hija.
Luis conoció a la jovencita cuando tenía 8 años, pues la familia Dudamel estaba instalándose en el municipio Morán. Los vecinos contaron que él siempre la llevaba a la bodega, a la iglesia o hacer diligencias.
Se volvió un caso cangrejo
El caso de la hija del pastor conmocionó tanto a los habitantes del caserío, que exigían que atraparan al responsable. Funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc visitaron la zona más de tres veces e hicieron experticias dos veces en la vivienda y visitaron varios sectores cercanos.
Al principio los vecinos contaban que no habían visto nada, luego les contaron a los funcionarios que una persona desconocida había estado rondado el sector, pero no lograban dar nada concreto.
Pasaron 35 días, día y noche, en los que los funcionarios investigaban el caso para poder dar respuesta a los padres de la víctima, que lloraban la pérdida de su hija y además para devolverle la tranquilidad al caserío, pues las personas iban a sus trabajos y regresaban a casa con temor, pues decían que el matón estaba cerca.
El 11 de julio de 2019, libraron la orden de aprehensión en contra de Luis Antonio por el presunto delito de femicidio.
Douglas Rico, director del Cicpc, fue el encargado de difundir la información de la captura y el móvil del crimen. Ratificó que el hombre mantenía relaciones amorosas con su cuñada.
Rico destacó que cuando la jovencita decidió dejar el circulo amoroso, supuestamente, motivó al agresor a tomar un machete y aprovechó cuando estaba sola para matarla.
Regresa a la escena& ;
El presunto homicida de la jovencita regresó horas después a la escena del crimen. Una fuente policial destacó que la mayoría de las personas que cometen un crimen regresan a la escena.
«No hay crimen perfecto», recordó una fuente consultada, quien además detalló que Luis, presunto implicado, había confirmado esa frase.
Por fuentes ligadas a las investigaciones, se conoció que Luis Antonio, presuntamente, dijo que él se había regresado porque no creía lo que había hecho, estuvo por mucho tiempo en las tierras donde sembraba café y luego retornó a la vivienda de sus suegros, donde vivía la menor.
Contaron que el chamo luego que llegó a la casa vio lo que hizo.
Los funcionarios del Cicpc colectaron todas las evidencias, entre esas el machete arma con la que asesinaron a la menor, además de la ropa del presunto asesino.
A Luis Antonio se lo llevaron detenido hasta la sede del Eje de Homicidios del Cicpc en Barquisimeto, en donde se encuentra recluido.
Destruyó núcleo
El hombre implicado en el presunto delito de femicidio habría destruido tres núcleos familiares, la de su familia (esposa e hijos), la de sus suegros y la de sus padres.
Vecinos contaron que luego de la muerte de la joven los padres y hermana de ella se fueron a Portuguesa y los papás de Luis también se alejaron del caserío.& ;