Gabriel Grisanti | LA PRENSA.– Aunque se especulaba que habían tres privados de libertad golpeados y heridos con perdigones en el Centro de Coordinación Policial “Jiménez” (Policía de Lara), solo uno fue llevado a la emergencia del Hospital “Doctor Baudilio Lara” de Quíbor para ser atendido.
Se trata de Josué David Torrealba, de 18 años, quien cumplió tres meses de detención, según una familiar que prefirió no identificarse y que esperaba a que le administraran calmantes y una solución fisiológica ayer en la tarde.
Según la dama, esperan que hoy, previa autorización del Ministerio Público, sea revisado por un médico forense. Josué David presuntamente fue atacado por un funcionario policial del CCP “Jiménez”, quien le dio con la culata de una escopeta.
Afuera del recinto, ubicado en la calle 9 entre avenidas 11 y 12 del sector San Rafael en Quíbor, esperaban madres, esposas y tías de los 70 privados de libertad que allí se encuentran. Según ellas, en un espacio reducido, como ocurre en el resto de las estaciones policiales del estado.
Insistían que adentro tenían a dos hombres con heridas de perdigón en la cabeza y abdomen, pero que por arbitrariedad del jefe de control de detenidos del lugar, a quien identificaron como Alexander Abarca no los trasladaban al hospital.
La situación irregular se produjo el miércoles cuando un preso nuevo logró escaparse del área preventiva. Él fue apresado el martes en la mañana.
Por ello, sacaron a todos los detenidos al comedor destinado a los funcionarios destacados allí mientras realizaban una requisa en los calabozos. “Cuando nos alborotamos exigiendo que los traten bien, nos amenazan conque se los llevarán a la comisaría 30”, decía una familiar.