Un lapso de 12 horas, a partir de las 10:20 p.m. del sábado y hasta final de la mañana de ayer dejó tres fallecidos por diversos accidentes en motos en el municipio Iribarren. Las víctimas fueron un militar, una adolescente y un obrero, quienes sufrieron politraumatismos y complicaciones.
El primer fallecido fue Oscar Véliz Herrera, sargento tercero de la GNB, quien sufrió el accidente en moto el pasado jueves en la Intercomunal de Duaca, a la altura de El Pampero. Sólo le ocasionó una lesión en la pierna que ni superó los 10 puntos de sutura, pero este sábado sufrió un fuerte dolor, por lo que lo ingresaron de nuevo al Hospital Central Antonio María Pineda y falleció de un paro cardíaco cuando se disponían a intervenirlo.
El padre y otro pariente cercano del militar, de 33 años, se encontraban confundidos porque no se trataba de un lesionado de gravedad. Sólo le afectó la pierna derecha, cerca de la rodilla y en todo momento se mantuvo consciente. Ningún examen arrojó que se afectaron sus órganos vitales.
En el caso de la menor, la tragedia ocurrió a las 8:30 a.m. cuando la adolescente, de 17 años, regresaba a su casa en Nuevo Barrio, iba de parrillera a bordo de una moto. El conductor no sufrió traumatismos graves, pero ella murió a los pocos minutos.
«No estoy para nadie, se me murió mi hija», dijo el padre de la víctima, así respondió una llamada telefónica y volvían a brotar lágrimas de sus ojos mientras esperaban el cuerpo en morgue. Explicó que su primogénita venía hacia su casa por el mencionado sector, pero no tenían detalles del suceso. Desconocía si fue producto de un impacto contra un vehículo o por pérdida de control de la moto por parte del amigo de su hija.
La familia sólo sabía que el acompañante no sufrió mayores lesiones y estaba en averiguaciones por los funcionarios de tránsito para esclarecer este caso.
La recién graduada de bachiller cursó estudios en el liceo La Creación. Era muy simpática y su trato cordial le hizo ganar el cariño de parientes y vecinos.
La tercera muerte, inicialmente fue un lesionado que ingresó a las 4:00 a.m. al Hospital Central. A Gabriel José Jiménez González lo consiguen malherido, cerca de su moto en El Tostao y sólo resistió hasta final de la mañana de ayer, debido a traumatismo craneoencefálico severo y de gravedad en sus extremidades.
Su hermano Jonniel Jiménez estaba muy conmovido en la entrada de Emergencia, recién teniendo la confirmación del deceso. Señaló que estuvo reunido con amigos ingiriendo bebidas alcohólicas en El Tostao. La última vez que lo vieron fue al salir de su casa, en el barrio Las Colinas, ubicado por la carretera vieja hacia El Tocuyo.
Pero familiares no conocen a ese círculo de allegados ni alguien que les informara hasta qué hora estuvo compartiendo con ellos y tener un estimado del momento en que sucedió el accidente. Tampoco saben de testigos, alguien que lo estuviera acompañando en ese momento.
La víctima, de 26 años, se dedicaba a trabajar en la construcción, contaba con varios años de experiencia en albañilería, especialmente con yeso. Era soltero y no deja hijos.