Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- «Ellos (PNB) siguen enlutando a las familias larenses«, dice en medio del llanto un familiar de Jonathan José Túa Piña, de 24 años, quien fue uno de los ocho hombres que murieron en manos de los funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana en diferentes sectores de Barquisimeto y Cabudare.
La versión policial indica que los hombres murieron al presuntamente enfrentarse a comisiones de la PNB, entre esos FAES y Brigada de Respuesta Inmediata (BRI), sin embargo cuatro familias de los ocho muertos, refutaron la versión policial y aseguraron que a sus parientes los sacaron de sus viviendas «vivos».
Los muertos quedaron identificados como: Miguel Ángel Rangel (24), Randy José Flores (30), Yorman de Jesús Yánez (22), Ángel Jean Rojas (40), Jesús Anleto Lobatón (24), Maikel José Martínez (25), Efren Ramón Pérez (33) y Jonathan José Túa (24).
Vecinos de La Carucieña contaron que el viernes desde bien tempranito comenzaron a ver patrullas de las FAES por el sector, pero no fue sino hasta casi las 7:00 de la mañana que llegaron a la vivienda de Miguel Ángel y supuestamente, lo sacaron de la casa, a los pocos minutos se escucharon varias detonaciones.
«No sabíamos qué pasaba, pero al asomarnos en el sector observamos a varios policías y supimos que a ese chamo lo habían matado«, comentó un vecino.
Mientras que los familiares de Yorman relataron que ese día en la madrugada llegaron hasta su casa, en el barrio El Bolívar, al oeste de Barquisimeto y un grupo de funcionarios de las FAES lo sacaron. «Él iba vivo, se lo llevaron con vida y apareció muerto en la morgue», dice en medio del llanto un familiar, quien no quiso identificarse por temor a represalias.
Según el reporte policial a las 9:00 de la mañana, Yorman y Randy resultaron heridos en el sector El Molino de Macuto, cuando, presuntamente, abrieron fuego contra las FAES.
Un familiar de Jonathan José contó que el sábado a las 2:00 de la madrugada llegaron alrededor de 15 funcionarios a la vivienda de él, ubicada en Villa El Milagro en La Mora, Palavecino.
«Los vecinos vieron como lo sacaron caminando de su rancho y luego sacan que se resistió a la autoridad. Lo encontramos muerto en el ambulatorio de Cabudare», comentó un pariente.
Familiares de los fallecidos pidieron justicia y que «basta del abuso de poder», además señalaron que a los venezolanos les siguen violando el derecho a la vida.
Desaparecido
Horas de angustias vivió la familia de Jesús Anleto, a quien buscaban desde el viernes. Un familiar contó que ese día salió de su casa en el barrio 5 de Julio con destino a su trabajo, pero nunca llegó.
«Estaba desaparecido desde el viernes, la última vez que lo vimos fue cuando salió temprano, nos angustiamos cuando nos dijeron que no llegó a su trabajo», contó el familiar.
A Jesús lo buscaron por varias zonas, policías y centros asistenciales, al no tener respuestas de él, tomaron la difícil decisión de ir a la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda.
«Es él, no puede ser», gritaba desesperada una joven mientras abrazaba a otra, la muchacha reconoció el cuerpo de Jesús dentro del área patológica.
A Jesús lo hirieron mortalmente en Brisas del Mayorista, sector 2. Allegados a la familia aseguraron que no se trató de un enfrentamiento.
Tenían registros policiales
Los ocho hombres que murieron en presuntos enfrentamientos presentaban registros policiales, según contaron las autoridades. Entre los delitos destacan porte ilícito de arma de fuego, droga, resistencia a la autoridad, hurto y robo.
«Que tengan registros policiales no les da el derecho de matarlos. Si ellos están incumpliendo con la ley el deber es detenerlos. Queremos que se haga justicia por todas las muertes ocurridas el viernes«, comentó un familiar de uno de los abatidos, quien no se identificó por temor.
Ayer en la mañana estaban en la espera en morgue para poder retirar los cuerpos.