Euseglimar González | LA PRENSA DE LARA.- José Enrique Luis Betancourt Ávila, de 35 añ;os de edad, murió en extrañ;as circunstancias en Cali-Colombia y su madre pide justicia por su muerte. El hombre, quien era boxeador y oriundo de Barquisimeto, aparentemente, presentó signos de violencia, por lo que su madre asegura que fue asesinado.
Silyer Ávila, madre de José Enrique, en medio de su dolor detalló que su hijo murió por asfixia mecánica, pero para ella su muerte es muy extrañ;a y no fue investigada por parte de las autoridades de Colombia.
«A él lo mataron y nosotros nos enteramos el 10 de febrero, un día después. Exijo justicia por la muerte de mi hijo, él era un muchacho bueno y trabajador, una persona maravillosa», comentó Ávila.
La madre de José Enrique tuvo catorce horas de vuelo, desde República Dominicana hasta Panamá y desde allí hasta Cali-Colombia. Al llegar, la dama se dirigió hasta la morgue y reconoció el cuerpo de su hijo, estando en medicina legal le informaron que el móvil de la muerte aún no ha sido establecido.
Lo que deseaba Silyer era que su hijo fuera sepultado en su tierra, comenzó a hacer la documentación para poder retirar el cadáver y fue así como comenzó la odisea para llegar a Venezuela.
El martes el cuerpo de José Enrique fue sepultado en el Cementerio de Palavecino. Su madre con el corazón destrozado, pero aún con fuerza, asegura que hará justicia por su hijo.
