Agencias | LA PRENSA DE LARA.- Continúan los enfrentamientos entre delincuentes de las bandas que operan en la Cota 905 y comisiones mixtas de organismos de seguridad del Estado este viernes 9 de julio.
Por segundo día consecutivo, residentes de al menos cinco parroquias del municipio Libertador de Caracas amanecieron con el ruido de disparos y fuertes detonaciones.
Pasadas las 7:00 am, el periodista Román Camacho informó que al menos 800 funcionarios policiales tomaron la Cota 905 en horas de la noche, y comenzarán un operativo para revisar casa por casa en búsqueda de los líderes de la banda.
Durante las primeras 24 horas de enfrentamientos, entre miércoles y jueves, se registraron al menos ocho personas fallecidas, entre ellas dos funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB).
El comunicador Delmiro de Barrio recomendó a los ciudadanos no transitar a pie ni en vehículo por ninguna zona aledaña a la Cota 905, incluyendo autopistas.
Desde el pasado miércoles en horas de la tarde, delincuentes pertenecientes a las bandas de El Coqui, Vampi y Galvis han causado terror en zonas de El Cementerio, El Paraíso, El Valle, La Vega, Quinta Crespo, y alrededores.
Los criminales han disparado hacia zonas residenciales, una situación que ha dejado a varias personas heridas y otras muertas a causa de las balas perdidas. Edificios de zonas aledañas también han reportado daños por los disparos.
Las comisiones policiales tienen más de 24 horas tratando de controlar la zona donde operan los delincuentes.
Funcionarios de la Fuerza de Acciones Especiales (FAES) tomaron e incendiaron «La Gallera», el lugar donde la banda delictiva comandada por el Coqui realizaba fiestas en la Cota 905.
Según información extraoficial, la acción de la banda de la Cota 905 se produjo porque presuntamente resultó herido en un enfrentamiento con agentes de seguridad del Estado Leonardo José Polanco, alias Loco Leo, que mantiene en zozobra la zona popular de El Valle, en la capital.
Recompensa
El Ministerio de Interior, Justicia y Paz ofreció una recompensa por los tres principales miembros de la banda: el Coqui, el Vampi y Garbis.
Por cada uno de ellos se ofrece 500.000 dólares.
Las autoridades han pedido a la población que tenga información sobre el paradero de estos delincuentes o que pueda contribuir con su captura que lo comuniquen directamente o través del 911.
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