Jennifer Orozco | LA PRENSA.- Luego de los resultados electorales, el sector Primero de Mayo de Quíbor se convirtió en una completa “locura”. Entre tanto carro, música y alcohol un motorizado llegó disparando en la calle 9B, logrando asesinar a un adolescente de 15 años. Otras dos personas jóvenes resultaron heridas.
Según cuentan los vecinos de la zona, desde temprano había muchos carros y camionetas paradas en la calle con música e ingiriendo bebidas alcohólicas.
A las 9:00 de la noche pasó una camioneta lanzando billetes de 50 y 100 bolívares que la gente rompía como papelillos. Bailaban en la calle y cantaban.
Luego de que se emitieran los resultados electorales la rumba seguía con música a todo volumen. Pero cerca de las 12:00 de la medianoche del domingo, un motorizado armado se acercó hasta la parranda. Primero hizo un tiro al aire y después comenzó a disparar contra la gente que estaba en la acera.
Sonaron seis detonaciones y luego muchos gritos. Quienes pudieron encender sus carros e irse la piraron, pero en el sitio y tirados sobre la acera y el pavimento estaban tres personas heridas de bala.
El primero en ser auxiliado fue el adolescente de 15 años, que murió a los pocos minutos de ingresar al Hospital de Quíbor. Luego una muchacha de 17 años con un disparo en la pierna y un hombre identificado como José Gregorio Lucena (26) con un disparo en el hombro fueron trasladados hasta el Hospital Central de Barquisimeto.
En el sitio sólo quedó la sangre del muchacho, a quien desconocían en la zona. Sus familiares no llegaron hasta el Hospital de Quíbor y los enfermeros decían que había que avisarles porque quienes lo auxiliaron lo dejaron allí sin nada.
Zona candela
Vecinos aseguran que aunque es primera vez que asesinan a alguien en esa calle, la zona de Primero de Mayo siempre ha sido candela y siempre hay tiros.
Eso es todos los fines de semana. Las camionetas se paran en las calles, ponen un musicón, beben, bailan, gritan y uno tiene que soportarlo todo. Queremos que el Cicpc se meta para este sitio y nos ayude a controlar la situación de los fines de semana”, reclamaban.
Lo que dicen los vecinos es que hampones de otras zonas aprovechan las “rumbas callejeras” para poder cobrar sus venganzas. Hasta ahora desconocen para quién eran los tiros que propinaron el domingo, pues el pistolero nunca apuntó hacia una persona.