MARIO SOSA | LA PRENSA.- Los vecinos del sector El Roble, en Carora, se espantaron ayer con el macabro hallazgo de un feto en avanzado estado de descomposición. El cuerpo fue encontrado en la parte trasera de la casa comunal y cancha de la comunidad. Afirmaron asombrados que es la primera vez que ocurría un hecho de esta naturaleza.
Un hedor fétido mantuvo incómodos a los vecinos de la carrera 2 con calle 4 de El Roble. No pocos concluyeron que se trataba de algún animal muerto o de restos de comida, pero en horas de la tarde y con el calor no aguantaron la putrefacción y decidieron indagar de dónde provenía.
La sorpresa fue tremenda cuando entre el monte y cerca de un árbol, encontraron el feto de al menos 8 meses de gestación y sin vida. Los restos estaban cubiertos por las moscas. Rápidamente, los vecinos llamaron a los funcionarios del Cicpc de Carora para que hicieran el levantamiento del cuerpecito. Gran cantidad de vecinos y curiosos llegaron al sitio para ver lo sucedido mientras los detectives recolectaban el cuerpo, que se encontraba envuelto en una bolsa negra con una funda de almohada. Se presume que los perros intentaron rasgar la bolsa, pero no alcanzaron el cuerpo del bebé.
Los vecinos creen que la mamá pudo haber dejado el feto en la madrugada aprovechando la oscurana y con el transcurrir del día, el calor y la humedad lo fueron descomponiendo. Además amenazaron con linchar a la madre en caso de que sea identificada.