Tatiana Suárez | LA PRENSA.- Luego de que el superintendente William Contreras anunciara el día de ayer que las tiendas «El Principito», mejor conocidas como EPK, debían bajar los precios de sus productos, (con un descuento del 70%) la gente no espero para plantarse desde tempranas en las cercanías de las instalaciones.
En todo el territorio nacional se pueden observar las largas colas que abarrotan a las entidades. EPK es de alguna manera una de las marcas preferidas para vestir a los niños. Algunos padres manifiestan que esta es una oportunidad para comprarles los estrenos a sus hijos ya que los altos costos no les habían permitido hacerlo antes.
Tras este anuncio las redes sociales se encendieron, en las que se podían encontrar un choque de opiniones. Muchos usuarios se mostraron molestos y no vacilaron ni un segundo para expresar la decepción que sentían al respecto.
De hecho, muchos calificaron de «saqueo autorizado» la decisión de la Superintendencia de Precios Justos (Sundde).
«Me parece chimbo la decisión que tomaron, siento que la gente que compra en EPK forma parte de un robo disfrazado para esta empresa tan importante para el país», expresó Katheryn Sánchez, al ser consultada por La Prensa.
Sin embargo hay quienes celebran la medida, como Carlos Saldivia, quien asegura que apoya «la medida que está tomando el gobierno porque EPK es una empresa capitalista que nos quiere quitar el dinero a todos los venezolanos».