El sector transporte público del país está considerando una nueva revisión y aumento en el costo del pasaje urbano en los próximos meses. Esta evaluación surge a raíz de la rápida pérdida de valor del bolívar, que, según transportistas, ha dejado sin efecto el más reciente ajuste tarifario aprobado hace solo semana y media. La propuesta central del sector se enfoca en establecer una tarifa que mantenga su poder adquisitivo a lo largo del tiempo.
José Luis Trocel, presidente del Comando Intersindical del Transporte, ha sido enfático al señalar la necesidad de anclar el precio del pasaje al dólar estadounidense. El representante gremial plantea que el costo del servicio debería equivaler a 0,4 o 0,5 dólares americano. Según Trocel, emitir tarifas únicamente en bolívares no beneficia al sector, dado que la devaluación constante e insostenible del monto ha devaluado el pasaje de Bs. 40 a tan solo semana y media de su publicación oficial.


Transportistas quieren anclarse al dólar estadounidense
Para el Comando Intersindical de Transporte, la solución más viable a largo plazo es abandonar las tarifas fijadas en moneda local. El dirigente explicó en una entrevista para Fedecámaras Radio que es fundamental que la tarifa se mantenga estable en el tiempo para poder garantizar la operatividad y sostenibilidad del servicio, un objetivo que solo se lograría con un monto vinculado a una divisa fuerte como el dólar.
Finalmente, Trocel aprovechó la ocasión para reiterar un llamado al Ejecutivo nacional para que se implemente un subsidio de transporte directo para los usuarios. El dirigente gremial extendió la solicitud a los ciudadanos para que se unan a la petición de que se les asigne un bono de transporte cuyo monto debería oscilar entre los $25 y $30 mensuales, lo que ayudaría a los trabajadores a costear la tarifa sin afectar sus ingresos.