Fabiola Barrera | LA PRENSA DE LARA.- Ante la inercia por parte de las autoridades de frenar el transporte pirata hacia y desde la frontera, los trabajadores de este sector dan un ultimátum de 24 horas al gobierno a fin de que tome cartas en el asunto y los dejen trabajar.
Reunidos esta mañana en el estacionamiento del terminal de pasajeros de La Concordia, una representación considerable de trabajadores del volante, manifestó su descontento ante la inoperancia de los responsables en el tránsito en el estado, ante la situación, que afecta a más de dos mil conductores que desde comienzos de año no pueden trabajar, ya que no se les permite prestar sus servicios hacia y desde la frontera con el vecino país de Colombia.
En este sentido, Jorge Martínez Espinoza, representante de la línea Fronteras Unidas, indicó que desde hace 56 años prestan sus servicios y es primera vez que se les impide trabajar. Refirió a que la situación con el COVID-19 es delicada y se deben tomar medidas pertinentes para evitar el incremento de contagios en la entidad.
Asegura que aunque no reciben gasolina subsidiada, quieren seguir trabajando hacia la frontera. «Necesitamos que el ministro ponga sus ojos a la frontera. Si se reactiva la frontera son muchos los recursos que se pueden dar al país», dijo.
Indicó que se han entregado infinidad de oficios a autoridades relacionadas al transporte, pidiendo el apoyo en cuanto a la piratería, pero no se han tomado cartas en el asunto. «Si nos dejaran trabajar, la piratería se hace a un lado porque nuestro trabajo es eficiente. Más de 50 años de trabajo y no hemos tenido siniestros con fallecidos. Nos tienen invisibilizados».
Y es que los piratas están haciendo su agosto, pues los transportistas aseguran que estos cobran hasta cien mil pesos por puesto hasta San Antonio, cuando el pasaje en las rutas formales oscila entre 15 y 25 mil pesos, es decir, hasta cuatro veces el costo de un solo pasaje.
Ultimátum
Por su parte, Freddy Solano, indicó que es un clamor general de todos quienes hacen vida en el principal puerto terrestre. «Esa ruta es nuestra y es hora que sea trabajada por profesionales que causan accidentes en esa vía».
Pidió que se les deje trabajar al sector transporte en el estado Táchira, situación que calificó como «tomadera de pelo», ya que esta medida restrictiva aplica solo para la región andina. «Damos 24 horas para una respuesta positiva al sector transporte. Hay unidades que vienen desde lejos y no pudieron salir a trabajar».
Indica que la medida de restricción hacia la frontera ha afectado a más de tres mil transportistas, quienes se ven en la obligación de buscar otras formas de sustento, ya que no se les permite llevar pasajeros a San Antonio.
Por su parte, Ricardo Durán, representante del gremio de transportes masivos (autobuses), se unió al clamor de los transportistas de cinco puestos, pues ellos también se mantienen sin trabajar desde el inicio de la restricción. «Hacemos vida dentro del estado y no salimos del estado para que no nos dejen trabajar. A veces no tienen ni un kilo de harina para llevar a sus hogares».
Espera que en las próximas 24 horas se les dé una respuesta oportuna y puedan trabajar, ya que para ellos está descartado trabajar como piratas. «Ser un pirata es ser desleal al gremio, por eso preferimos hacer otras cosas como vender dulces, hacer de albañiles y hasta vender las pertenencias, pero no vamos a piratear».
Alberto Aranda, representante de la Cooperativa Estrella Roja, reiteró que el sustento de ellos es el transportar personas a su destino. «Todas las semanas nos salen con el mismo cuento de que sí vamos a trabajar y no es así. Deben ponerse manos en el corazón», dijo.
Comentó que hay padres que tienen hijos con condiciones especiales y no tienen capacidad de dar respuesta ante alguna emergencia con sus hijos. «No nos permiten laborar».
Interurbanas
Por su parte, trabajadores de rutas interurbanas esperaban que durante esta semana flexible que coincide con el asueto de carnavales, se les dejara trabajar. Sin embargo no fue así.
«En vista de las órdenes del ministerio de transporte, el Táchira es el único estado que se mantiene paralizado», dijo un encargado de una de las líneas interurbanas, quien pidió no ser identificado.
Hizo un llamado a la conciencia por parte de las autoridades, ya que por cada línea, no menos de cincuenta trabajadores directos se ven afectados.
Indica la fuente que para trabajar hicieron una inversión millonaria en máquinas de ozono y ni siquiera han recuperado ese dinero, ya que ni un mes estuvieron operativos. «Se hizo esa inversión y ahora están las unidades paradas».
Fuente: La Prensa de Táchira