LA PRENSA DE LARA | AFP.- Un deslave generado por torrenciales aguaceros arrasó Tovar y lo dejó sumergido entre peñascos, troncos y lodo. La tregua fue de tres días: volvió la lluvia y con ella, el temor entre los pobladores, con calles y casas cubiertas de nuevo por el barro.
Tovar es uno de los tres municipios del estado Mérida azotados por los aguaceros que arreciaron el lunes, dejando un total de 20 muertos y 17 desaparecidos.
El panorama es desolador. Un barro ya compacto cubre casi la totalidad de una casa. Apenas se logra apreciar el dintel del umbral de la puerta: en el muro, un escudo de Venezuela en cerámica.
De lejos se aprecian las pequeñas casas de techos de tejas al frente de un río de barro donde antes estaba la calle y troncos, ramas y rocas por doquier.
Un peñasco llega a ser del tamaño de una casa, constató un fotógrafo colaborador de la AFP.
«Por el olor que emana puede que haya gente allá dentro», dijo un rescatista apuntando a una vivienda enterrada.
Efectivos militares y de Protección Civil están en el lugar con excavadoras para despejar los caminos y apoyar en las labores de limpieza. Algunos vecinos se han volcado a esta tarea con picos y palas, con resiliencia, tratando de salvar lo poco que quedó.
En una calle de Tovar, un adolescente contemplaba cabizbajo su casa destruida. Un deslave le arrebató a sus padres y a su hermana. La escena fue captada por Rama Grosolia, un habitante de La Azulita, a hora y media por tierra de las zonas afectadas, quien se aventuró en su moto todoterreno para documentar lo ocurrido con su dron y gestionar donaciones junto a la Iglesia católica.
La carretera quedó destruida y las autoridades han restringido el paso hacia las comunidades afectadas por los riesgos que implica movilizarse en medio de rocas gigantescas y varios metros de lodo, comenta este voluntario. «Las imágenes más impactantes son las de Tovar, las calles con piedras, escombros», cuenta Rama, de 45 años de edad. «Conocimos un señor que perdió a su hermana, y estaba su sobrino que perdió a sus padres. Fue terrible, casas de dos pisos tapadas por lodo».
Cosechas perdidas
A las pérdidas humanas y la destrucción en cientos de viviendas se suman los estragos sufridos en esta zona desde donde sale buena parte de los productos agrícolas que se consumen en ciudades como Caracas.
Agricultores del Valle del Mocotíes han perdido sus cosechas, confirmó este viernes Nicolás Maduro al ofrecer un balance de los daños dejados por las lluvias en buena parte del país.
«Se perdió toda la cosecha del Valle de los Mocotíes, toda», dijo Maduro, quien prometió ayudas para los agricultores que antes de los deslaves ya batallaban con la falta crónica de combustible. Debido a ello, muchos han acudido al uso de animales de carga para arar la tierra, pues no tienen gasolina o diésel para las maquinarias, ni sacar sus cosechas.
La vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, visitó la zona afectada el jueves junto al ministro del Interior, Remigio Ceballos.
Muchos afectados en Tovar han buscado refugio en casa de conocidos. Otros han vuelto a sus viviendas, intactas o no tan golpeadas, con el temor que un nuevo aguacero cambie su suerte.
Se han instalado centros de acopio para asistir a quienes lo perdieron todo. Algunos quedaron solo con lo que llevaban puesto. Una señora abrió su casa para instalar una olla popular y asistir a sus vecinos y a los cuerpos de rescate.
Donaciones han llegado de todo el país. Civiles en motocicletas y en vehículos 4×4 han ayudado a trasladar la ayuda hasta el epicentro del desastre.
«Agradecemos a todos los que han venido a Tovar, a traer apoyo, a traer comida, traer enseres, medicamentos, todo, a los organismos nacionales (…;) y por supuesto esos organismos internacionales», dijo el gobernador del estado, el opositor Ramón Guevara, relegado en los planes de acción del gobierno nacional.
El interlocutor con Maduro es Jehyson Guzmán, llamado ‘protector’ de Mérida, una autoridad paralela designada en estados gobernados por la oposición. Guzmán anunció este viernes sobrevuelos por la zona del desastre para evaluar daños.
Las autoridades anunciaron además el restablecimiento parcial del servicio eléctrico y de teléfono e internet, que ya era deficiente antes del desastre. Cisternas de agua también fueron enviadas a la zona.
De los 23 estados del país, 18 presentan afectaciones por las lluvias, además de la capital Caracas: Amazonas, Anzoátegui, Apure, Aragua, Barinas, Bolívar, Carabobo, Cojedes, Delta Amacuro, Falcón, Portuguesa, La Guaira, Guárico, Lara, Monagas, Trujillo, Yaracuy y Mérida.