Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- El hecho de que el dirigente opositor Leopoldo López, que ha liderado las más grandes políticas para sacar del poder a Nicolás Maduro, haya logrado huir a España y se encuentre asumiendo una agenda para buscar elecciones libres en Venezuela por la vía de la presión internacional, representa para analistas políticos un cambio contundente en las estrategias que venía aplicando el gobierno interino de Juan Guaidó, que a lo interno lucía debilitado por la represión y las divisiones que ha logrado Nicolás Maduro a través de unas elecciones que buscan reemplazar al parlamento.
«La fuga de López marca una diferencia en el gobierno interino. Ha presentado una agenda con tres puntos, lograr mayor presión internacional para lograr elecciones libres, llevar a la justicia internacional a funcionarios venezolanos que son señalados de delitos de lesa humanidad y buscar financiamiento para ayuda humanitaria. Queda claro que a pesar de ser uno de los políticos más extremistas del país, termina hablando que el cambio, o la transición se piensa en términos de elecciones. «, comentó Colette Capriles, analista político.
Informó que la historia señala que los países dictatoriales que han tenido una transición democrática ha sido frecuente que tengan gobiernos duales. «Hay gente que trabaja desde afuera y gente que trabaja desde adentro en situaciones más duras. Coinciden países de Europa del este, Zimbabwe, cuando hicieron la transición a la democracia dejaron claro que es muy importante lo que ocurre en el territorio y cómo se puede articular un gobierno de transaccional desde afuera», mencionó.
«La unidad que plantea López tiene que ser auténtica, no de intereses personales. Aquí no caben elecciones mientras Maduro esté en el poder. Creo que lo que tenemos que hacer los dirigentes en el exilio es persuadir a la ONU, a la Organización de Estados Americano es que se activen doctrinas como la Responsabilidad de Proteger o el Tratado Interamericano de Asistencia Reciproca (TIAR) para pedir la intervención humanitaria en el país ante los niveles de miseria atroz en que se encuentra el país», fue el planteamiento que hizo Antonio Ledezma, quien al igual que López fue preso político en Venezuela y hoy se encuentra en España, exiliado.
Dirigentes de oposición consideran que esta libertad de la que ahora goza el fundador de Voluntad Popular, fue un duro golpe para el gobierno. «Es tanto el golpe que recibió Maduro que aun sigue allanando y persiguiendo a personas muy cercanas, tanto a Guaidó como a Leopoldo López en Venezuela. La huida del líder político generó un conflicto entre el gobierno de España y el régimen, que tenía algunos aliados con la tiranía», soltó Alfredo Ramos al ser consultado por LA PRENSA.
Diálogos ocultos
Para el politólogo Doriam González, el sábado 24 de octubre, fecha en que Leopoldo cruzó la frontera con Colombia, la noticia madrugó a la oposición pública pero no a los actores políticos del poder.
«Sale del país desde mi criterio con anuencia de Nicolás Maduro. Tuvo que haber atravesado no menos de 10 alcabalas, si salió con la anuencia de Nicolas Maduro no fue una negociación, fue más una articulación política de España y Venezuela», expresó.
«La acciones de la administración Maduro con todo y el escenario adverso son muy bien pensadas. Liberó en septiembre a 100 personas para atraer a la Unión Europea para que fueran veedores, no le resultó pero igual avanza en las elecciones del 6D», refirió.