viernes, 22 noviembre 2024
viernes, 22 noviembre 2024

Escasez de fórmulas lácteas repunta

Osman Rojas | LA PRENSA.- A los padres si los pela el chingo los agarra el sin nariz. Según los núme­ros publicados por la so­ciedad Defendamos la Nutrición, en Venezuela hay una escasez del 90% en cuanto a fórmulas lác­teas, situación que es aprovechada por los ba­chaqueros quienes ofre­cen las pocas que se con­siguen, en un millón 400 mil bolívares.

“Por internet los bacha­queros hacen fiesta. Yo tengo una semana bus­cando la leche maternizada, pero por ninguna par­te se consigue”, comenta la señora María Eugenia Carrasquel, madre de un pequeño de ocho meses.La mujer, que se encon­traba a las afueras de Far­
matodo preguntando por la leche maternizada, de­nunció que en Facebook le estaban pidiendo un millón 400 mil bolívares por una lata

“Para mí, pagar eso es imposible. Mi esposo trabaja como ayudante en unos chinos y allí gana sueldo míni­mo. Yo hago uñas y lo po­co que entra lo gasto en comida”, lamentó.

El drama de Carrasquel es el mismo que atravie­san cientos de padres en el estado y es que, pagar una lata de fórmula lácteas duele más que una pe­drada de cerquita.

Carolina Cortés, vice­presidenta de la Asocia­ción de Madres y Padres en Lara (Mapani), habló sobre esta situación y di­jo que hay padres dándo­le a sus hijos atoles o pu­ré porque no tienen có­mo comprar fórmulas bachaqueadas.

La luchadora social ex­plica que en las grandes farmacias (Farmatodo y Locatel) el producto lle­gaba cada quince días pe­ro la regularidad en la distribución se ha visto afectada en los primeros dos meses del año pues hace más de tres sema­nas que el estado no reci­be leche maternizada.

Lo que más nos indig­na es la postura silente que tienen las autorida­des nacionales con el te­ma del bachaqueo. Hay personas que ofrecen la leche maternizada de manera descarada en las redes sociales y nadie frena esto”, dijo.

La Prensa tuvo acceso a una conversación que una madre tuvo con un bachaquero de leche ma­ternizada. En el chat (que se le mostró al equipo re­porteril) se veía cómo el comerciante presionaba a la mujer para que hicie­ra la transferencia lo an­tes posible.

“Sólo me queda una y me la están comprando”, “si no pasa la plata hoy no le garantizo la lata” o “apenas transfiera me pasa el capture”, eran fra­ses que se podían leer en la conversación telefóni­ca que la madre sostuvo con el bachaquero.

Noticias relacionadas

No te pierdas

A WhatsApp llega la transcripción de los mensajes de voz

WhatsApp ha empezado a implantar las transcripciones de los mensajes de voz: una nueva función que permitirá leer los mensajes de voz. Así lo...

Redes sociales