Luis Felipe Colmenárez | LA PRENSA DE LARA.- Las elecciones parlamentarias que se realizan este domingo 6 de diciembre son un fraude ante los ojos de la oposición venezolana. Por tal motivo, diversos dirigentes políticos han utilizado sus redes sociales para exponer que la soledad que reina que en los centros electoras son la muestra de la falta de garantías que se ve en el proceso.
A través de Twitter, la diputada Bolivia Suárez aseguró que los venezolanos se encuentran dando una cachetada al gobierno de Nicolás Maduro, agregando que se niegan a seguir viviendo en la precariedad.
En tal sentido, el también legislador, Alfonso Marquina, expresó que el silencio de la colectividad habla por sí solo, y es que según comenta, la ausencia de votantes representa la protesta más contundente.
«El régimen disfruta poner a hacer cola a los venezolanos. Colas para la comida, para la gasolina, para el gas, para que los abuelos cobren la pensión, pero hoy con el fraude electoral no hay cola en ninguna parte«, sumó.
En tal sentido, el primer vicepresidente del Poder Legislativo, Juan Pablo Guanipa, declaró que ni «secuestrando» las tarjetas de los partidos políticos de oposición lograron movilizar personas.
«Seguramente saldrán más tarde diciendo que millones de personas participaron y anunciarán unos resultados montados por ellos mismos, pero la verdad la vemos en estas fotos, nadie cayó en este engaño» dijo.
Apuntó que el «fraude» no representa ninguna solución para los problemas de los venezolanos.
«Secuestraron las tarjetas de los partidos, compraron alacranes tarifados, chantajearon al pueblo con comida a cambio del voto y, aun así, es mínima la concurrencia al proceso fraudulento del régimen y sus compinches» dijo por su parte Henry Ramos Allup junto a unas imágenes que desnudan la desolación de los centros.
Delsa Solorzano sustentó que la dignidad del pueblo venezolano ha quedado en evidencia al ver como lucen vacíos los centros de votación.
A su vez, Miguel Pizarro, comisionado para la Organización de las Naciones Unidos dijo que los venezolanos que luchan por un país democrático y con un futuro diferente, no serán parte de lo que según las toldas adversas a Maduro, es una farsa.
Asimismo, el canciller del gobierno interino de Venezuela, Julio Borges, envió una alerta internacional para reiterar que el proceso electoral es un «fraude y por lo tanto, se requiere de mayor presión del mundo para lograr una elección libre». A su vez, recordó que el gobierno de Nicolás Maduro destruyó la confianza en el voto como instrumento de cambio.
Más de 20 de los 30 millones de venezolanos están llamados a las urnas en unos comicios en los que el Partido Socialista Unido de Venezuela busca la «victoria perfecta» y hacerse con el único poder que desde 2015 controla la oposición liderada por Juan Guaidó.