Agencias | LA PRENSA DE LARA.- El grupo islamista Hamás dijo hoy que los rehenes capturados por sus milicianos en Israel se usarán como moneda de cambio para exigir la liberación de prisioneros palestinos en cárceles israelíes, mientras fuerzas del Estado judío siguen luchando contra las milicias palestinas en zonas cerca de Gaza en las que hay personas cautivas y donde aún no retomaron el control.
«La cantidad de rehenes que tenemos liberará a todos los presos palestinos de las cárceles israelíes«, declaró Saleh al Arourim, alto cargo de Hamás, que remarcó que el grupo entró «en esta batalla preparado para todos los escenarios, incluido uno a largo plazo» y también una posible operación militar terrestre israelí en Gaza.
A su vez, las Brigadas al Qasam, brazo armado de Hamás, dijeron que parte de sus milicianos que se infiltraron a Israel esta mañana realizaron «un ataque simultáneo contra más de 50 posiciones«, y añadió que los milicianos siguen luchando en unos 25 puntos.
El portavoz del Ejército israelí Daniel Hagari aseguró que las tropas combaten ahora en 22 lugares, y que «no hay comunidad en el sur de Israel» donde estas no tengan presencia. Agregó que algunas localidades «se han librado de terroristas», pero en otras se siguen combatiendo.
En las comunidades de Ofakim y Beeri «hay rehenes tomados», y también luchan ahí fuerzas especiales, algo que habría sucedido también en otros puntos donde Israel no recuperó control, según medios locales como el periódico Haaretz.
Según remarcó el Ejército israelí, «el principal objetivo ahora es eliminar» a todos los milicianos palestinos que cruzaron la valla de separación de Gaza con Israel y que «están intentando de regresar a la Franja», por lo que las fuerzas israelíes prevén atacar primero «desde el aire» y después «con medios terrestres pesados».
Las fuerzas israelíes también siguen con la movilización de reservistas, hay 31 batallones regulares que ya están en la zona y se están llevando cuatro divisiones adicionales hacia el lugar.
El Ejército israelí se vio absolutamente desprevenido esta mañana, cuando le cogió por sorpresa una ofensiva de milicianos palestinos desde Gaza por tierra, mar y aire que desbordó el país y le llevó a declarar el estado de emergencia nacional en lo que el primer ministro, Benjamin Netanyahu, calificó de «guerra».
Al menos 100 personas han muerto en Israel por los ataques desde Gaza, que han incluido el lanzamiento de por lo menos 2.200 cohetes, aunque el número podría ser mucho más alto porque las sirenas anti-aéreas israelíes no paran de sonar en distintos puntos del país.
También hay más de 900 israelíes heridos, y los hospitales están en estado de urgencia.
En Gaza, los muertos por combates y los bombardeos israelíes son al menos 198 y hay más de 1.600 heridos.
En el enclave hubo ciertas celebraciones por lo que se considera como un logro militar palestino, y la mayor parte de sus habitantes permanecen encerrados en casa ante los fuertes bombardeos israelíes.
Los bombardeos israelíes comenzaron a dejar amplia destrucción en Gaza, y entre otros ataques, la aviación disparó contra un alta torre de 14 plantas y unas 100 viviendas, que quedó demolido.
Fuente: EFE, Jerusalén/Gaza, 7 oct.