EFE | LA PRENSA DE LARA.– Casi 1.400 efectivos combaten este sábado las llamas en Portugal a lo largo de todo el territorio continental a causa de 43 incendios rurales, que no han obligado a evacuar a la población.
Pese a que el Gobierno luso retiró la situación de alerta por incendios en el país hace una semana, continúan las restricciones de carácter regional.
La Protección Civil portuguesa ha informado a EFE de que hay ocho incendios en curso, ocho en resolución y 27 en conclusión, que han movilizado a 1.393 efectivos, 393 medios terrestres y 18 aéreos.
Los incendios de mayor magnitud se han dado en los concejos de Góis (Coimbra) y Vila Pouca de Aguiar (Vila Real), que han movilizado a cerca de 700 efectivos entre ambos esta jornada.
Las autoridades esperan controlarlos a lo largo del fin de semana.
El incendio en Vila Pouca de Aguilar comenzó el pasado 27 de julio y las autoridades lo habían dado por controlado este sábado, pero, con vientos inestables, se volvió a activar, explicó a EFE el oficial de Operaciones José Rodrigues.
El especialista añadió que las altas temperaturas que vive el país este fin de semana y la intensidad del viento, con ráfagas que «no son constantes y van en diversas direcciones», dificultan las labores.
Según datos del Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera (IPMA), hay cerca de un centenar de municipios en riesgo «máximo» de incendio en un ambiente «seco».
«Son noches tropicales y no hay recuperación nocturna, por lo que los productos combustibles están más disponibles», lo que facilita la ignición, añadió Rodrigues.
Aseguró que no han tenido que evacuar a la población pero que ha habido «algunas situaciones», sin especificar datos, de efectivos que han necesitado asistencia hospitalaria, aunque «ninguno en estado grave».
Desde enero hasta la semana pasada se registraron más de 6.700 incendios (con un elevado número de casos este mes de julio) en Portugal, que han quemado 56.000 hectáreas (más del doble que en todo el año pasado) en el país, y la policía ha detenido a más de 50 personas.
De acuerdo al Ejecutivo luso, la práctica totalidad de los incendios que han arrasado Portugal este año responden a la «acción humana».