Cristina Linárez | LA PRENSA.- “Sentimos que estamos en una guerra con la presión de los policías y de algunas personas de la comunidad que no quieren que hagamos la toma de uno de los cerros”, expresó molesta Thaís Mujica, una de las personas que está en la invasión del cerro que está justo al lado del preescolar Jacinto Lara, ubicado en la urbanización Macías Mujica.
Mujica expresó que 12 familias que viven arrimados en casas por la zona decidieron invadir el cerro el viernes pasado, como forma de presión ante la falta de respuesta por parte de las entidades del Gobierno nacional para la construcción de casas.
Sin embargo, desde el viernes los que viven en la parte baja del cerro en conjunto con funcionarios de la Policía Nacional del cuadrante 14, que están en un módulo policial en el sector, se acercan al cerro para intentar sacar a quienes están en la invasión.
“Nosotros ya limpiamos el cerro y lo queremos resguardar con ranchos mientras el Gobierno nos ubica en otro lado”, dijo Carolina Arrieche, una de las consultadas en la invasión.
En horas de la mañana del día de ayer, al cerro llegaron funcionarios del Cuerpo de Bomberos de Iribarren, quienes les dijeron a los que hicieron la toma del lugar que ese terreno no está apto para la construcción de ningún tipo de vivienda, y que en esta temporada es un riesgo porque las lluvias aflojan la tierra del cerro y esta puede descender.
Sin embargo, ante esta advertencia quienes están ahora ubicados en el cerro con especie de chozas hechas con palos y bolsa aseguran que no se irán del lugar hasta que el Gobierno a través de algunas de las misiones les construya una vivienda.
Y además le exigen a la comunidad que los dejen tranquilos, ya que aseguran sentirse acosados por quienes a cada rato llegan al lugar para sacarlos de ahí.
Quienes hicieron la toma del cerro afirman que están exigiendo de esa manera el derecho que tienen a la vivienda.