Osman Rojas | LA PRENSA.- Dos veces recorrió la avenida 20 de punta a punta. No quedó tienda sin inspeccionar ni tampoco prenda sin regatear; sin embargo, a las 5:03 pm de este sábado, Martín Suárez sólo había comprado un kilo de avena y una franelilla que encontró en 15 mil bolívares.
“Todo está carísimo”, dice el hombre mientras pregunta por el precio de unos zapatos en una prestigiosa tienda en el centro de la ciudad. Cuando la vendedora dice el costo (450 mil), Suárez se da media vuelta y sale del local sin ni siquiera dar las gracias.
Y es que las ofertas en ropa han desaparecido por completo. El centro de la ciudad, caracterizado históricamente por vender a bajos precios, luce con tiendas full de ropa, pero vacías de clientela.
Jorge Sandoval, administrador de una tienda en el centro, asegura que ahora vende ocho prendas cuando mucho. Comparado con años anteriores las pérdidas son millonarias, pues en diciembre del año pasado el promedio de prendas vendidas era de 30 por día.
“La gente quiere comprar pantalón en 40 y camisas en 20, y eso no lo consiguen en ninguna parte. Regatean los precios, aunque estén marcados en etiqueta y cuando uno no los complace ellos se enojan y se van”, lamenta el comerciante.
La Prensa hizo un recorrido por diversas tiendas en el centro para constatar los precios de espanto que se manejan en la actualidad. La visita en los comercios sirvió para confirmar que ahora un pantalón no baja de 250 mil bolívares, mientras que las camisas rondan los 180 mil bolívares. Lo más caro son los zapatos que se consiguen entre 200 y un millón 250 mil bolívares, mientras que los vestidos aparecen en los anaqueles en 700 u 800 mil bolívares.