José Miguel Najul | LA PRENSA.- Ante el alud de críticas emitidas por parte de las autoridades castrenses al Mercado Mayorista de Barquisimeto (Mercabar) el alcalde Alfredo Ramos responde, asegurando que las revisiones no deben ser una excusa para, una vez más, emprender un ataque oficialista en contra de empresarios que sí puedan estar trabajando bien.
Ramos, quien desde el principio se manifestó en contra de la “militarización” del mayorista de la ciudad, asegura estar consciente de que hay que revisar los excesos que se cometen por parte de algunas personas inescrupulosas, pero rechaza la posible generalización de las medidas que están tomando los militares.
“Un ejemplo es que el propio sindicato de Mercabar, que al principio había pedido la intervención militar, y que la celebró cuando se hizo, ahora se ha manifestado de manera contraria”, expresa.
El ejecutivo municipal de Iribarren tiene, exclusivamente, una competencia administrativa en materia de locales, así como la recepción de los recursos que provienen producto del pago de los estacionamientos y de los servicios.
Sin embargo, nunca han tenido el control de la dimensión pecuniaria de los rubros y productos que se expenden en las instalaciones, porque eso es competencia exclusiva del Gobierno nacional, a través de la Sundde, que debería estar presente permanentemente en Mercabar.