Osman Rojas | LA PRENSA.- Los niños del Hospital Pediátrico tienen un nuevo sitio para la aplicación de quimioterapias. La donación de algunos sillones y el apoyo de la Dirección Regional de Salud ayudó a cumplir el sueño de 200 padres que ahora tienen un lugar digno para que sus hijos se apliquen tratamientos contra el cáncer.
Figuras de superhéroes pintadas en las paredes, el Santo Cristo en una esquina y un televisor colgado en la pared (donde trasmitirán comiquitas) es el escenario con el que se encontrarán los pequeños de ahora en adelante.
“Esta área es para las quimioterapias ambulatorias. Aquí son 200 niños los que se van a beneficiar al mes”, fueron las palabras de la doctora Linda Amaro, viceministra de Salud y autoridad regional, cuando inauguró el servicio.
Amaro resaltó la recuperación de un servicio que estaba abandonado en su totalidad. “Hay mucho trabajo por hacer, pero vamos encaminados”, dijo.
Rafael Agüero, director del Agustín Zubillaga, explicó que antes de la inauguración de este servicio los niños que recibían quimioterapias lo hacían en el pasillo del cuarto piso.
Era un sueño poder entregar esta área. Conversamos con las autoridades regionales y conseguimos donaciones para materializar este proyecto. Poco a poco vamos convirtiendo al Hospital Pediátrico en la institución de referencia que debe ser”, comentó.
El rostro del doctor está pintado en una de las paredes del servicio. Usando una máscara y con traje de superhéroe el doctor es uno de los protagonistas del muro que alentará a los niños en su lucha contra el cáncer.
Hemos decidido hacer las cosas así porque eso va a motivar a los pacientes. Qué mejor para un niño que ver el rostro de un superhéroe y tener a Cristo al lado”, comentó Agüero a la hora de explicar el porqué de la decoración.
Aún falta
Los objetivos que la almiranta Carmen Meléndez había trazados para el Hospital Pediátrico han sido cumplidos en la mitad del plazo establecido.
100 días tenía la institución para sacar a los niños de los pasillos y recuperar los quirófanos inoperativos. Esos objetivos fueron cumplidos y han avanzado en un 150%, según el director. “Hay áreas por recuperar, pero el trabajo está hecho”, dijo con orgullo.