Víctor A. Rodríguez | LA PRENSA DE LARA.- La felicidad de los pequeños de la casa no tiene precio. Esa es la manera de pensar de los padres larenses quienes hicieron un esfuerzo extra para que sus niños no se quedaran sin su regalo de Niño Jesús. Durante el 25 de diciembre, predominaron en las calles obsequios como, balones, patines, bicicletas, carros, videojuegos, audífonos, muñecas, motos, entre otros.
Los niños en el barrio La Feria se concentraron en la cancha junto a sus padres para disfrutar con sus regalos, la alegría no cabía en sus caras y el cansancio era lo de menos.
«Me trajeron un balón de basket y me gustó mucho, cuando sea grande quiero ser jugador muy alto, pero para eso tengo que practicar bastante», dijo Xavier Marchán mientras jugaba con sus amigos con su balón nuevo.
Uno de los regalos que se vieron mucho fueron las bicicletas, en las calles de diferentes comunidad, los pequeños no paraban de pedalear y otros se atrevían a hacer piruetas.
«Este año me porté bien y el Niño Jesús me trajo una bicicleta, y una caja de juegos de te y de cocina. La pasé muy bien», expresó la pequeña Amor Castillo montada en su bicicleta nueva.
En un recorrido por LA PRENSA, se pudo observar que representantes optaron por trasladarse hasta las plazas más cercanas a su residencia para que los niños disfrutaran de sus obsequios. Tal es el caso del señor Alberto Jiménez que llevó a sus hijos hasta la plaza La Justicia. «La pasamos bien, en familia y encerrados, vivimos por aquí cerca, íbamos a venir en la tarde pero los niños ya querían salir para disfrutar de sus regalos», dijo mientras vigilaba a sus hijos que se paseaban con sus patines por toda la plaza.
En Barrio Unión, los vecinos decidieron trancar algunas calles para que los niños estuvieran seguros jugando sin que pudieran transitar los vehículos, jugaron con monopatines, balones de fútbol y baloncesto, carros a control remoto, juguetes de acción y muñecas.