Jennifer Orozco | LA PRENSA.- El equipo reporteril de La Prensa, que fue agredido el martes en la tarde por unos encapuchados que los entregaron a un convoy de la Guardia Nacional, aún espera una respuesta por parte del general Hernán Hómez Machado, sobre el robo del vehículo y pertenencias, así como por las agresiones físicas y verbales de las que fueron víctimas.
El periodista Luis Montes de Oca y el reportero gráfico Xavier Pérez, estaban el martes 23 de mayo en la tarde cubriendo un manifestación en contra del Gobierno Nacional en las adyacencias de la Unexpo, al oeste de Barquisimeto.
El vehículo, Fiat Uno verde año 2007, perteneciente a la empresa, lo dejaron estacionado frente al Velódromo de Barquisimeto. Aproximadamente una hora después de estar cubriendo la manifestación se iban a retirar, cuando siete tipos encapuchados los entromparon, encañonándolos para quitarles el vehículo. Los tipos se identificaron como funcionarios del Sebin y les exigieron a Montes de Oca y Pérez que entregaran sus pertenencias y se metieran a la parte de atrás de un Optra blanco, donde andaban los encapuchados. La otra parte de los supuestos funcionarios del Sebin se trasladaban en un vehículo vinotinto y una moto.
Estando dentro del Optra blanco, Montes de Oca y Pérez fueron amenazados con un arma de fuego, los obligaron a meter la cabeza entre las piernas y comenzaron a golpearlos con puños y lo que ellos presumen era la cacha del arma de fuego con la cual los encañonaron.
El equipo reporteril se identificó gritando a los encapuchados que sólo eran trabajadores de La Prensa, pero los tipos no les contestaban nada. Después de rodar unos
60 metros, el Optra blanco se detuvo en un punto que aún los agredidos no reconocen. Lo único que pudieron ver fue que iban a ser trasladados a un convoy de la GNB.
Los recibió un funcionario, del cual desconocen identidad, pero portaba su uniforme verde con el equipo antimotín. Este mismo funcionario le dijo a los encapuchados “déjenlos aquí, nosotros nos encargamos”. Lejos de ser ayudados, Montes de Oca y Pérez, fueron metidos a la parte de atrás del camión de la Guardia, marca JAC, placas GNB 03168. Les exigieron que mantuviesen la cabeza entre las piernas y de ahí los ruletearon un rato.
Minutos después el camión se detuvo en la avenida Rotaria, donde los GNB pretendían liberar al equipo, sin embargo Montes de Oca y Pérez no quisieron bajarse allí por temor a lo que les podía suceder. El funcionario que los recibió dio la orden de ir hasta el punto de control de la GNB frente a la sede del Gran Polo Patriótico, para dejar a los reporteros allí.
Cuando Montes de Oca y Pérez se bajaron, una femenina castrense y otro funcionario les dijeron que esto les sucedía “por no estar de parte de ellos durante las manifestaciones”.
El mismo Optra blanco más el motorizado encapuchados fueron vistos ayer en Barquisimeto en diferentes puntos donde se llevaban a cabo manifestaciones.
El mismo martes el director de La Prensa, Luis Grisanti, se comunicó con el general Hómez para hacer la denuncia y solicitarle una investigación sobre los hechos.
Sin embargo pasaron más de 24 horas sin respuesta por parte del funcionario.
Grisanti, declara que se espera que Hómez se pronuncie lo antes posible sobre la responsabilidad que tienen los verdes en este hecho. “Faltará ver si hay voluntad política por parte del general para esclarecer esta situación. Hómez debe aclarar por qué el convoy recibió de manos de encapuchados a los trabajadores de La Prensa, pues esto demuestra que hay sintonía entre encapuchados y funcionarios”, denunció.