Osman Rojas | LA PRENSA.- Una tras otra la señora Omaira Carmona recorre farmacias en Lara. En su mano lleva un récipe en el que claramente se puede leer ciprofloxacina 500 mg; “lo busco por una infección en la orina”, dice la mujer antes de continuar su peregrinaje.
Carmen Julia Martínez, madre de un pequeño de apenas 6 meses, comparte el sufrimiento de Carmona. Ella no necesita este antibiótico con efectos bactericida, pero desesperadamente busca Unasyn, que contiene ampicilina y se utiliza para las infecciones de las vías respiratorias, para su hijo hospitalizado en el Angustín Zubillaga. “El lunes me lo pidieron y aún no lo consigo”, relata.
El drama de estas dos mujeres se resumen en una palabra: escasez. Según los números que maneja la Federación Farmacéutica Venezolana (Fefarven) el 93% de los medicamentos para combatir las infecciones (antibióticos) escasean en el mercado. El súbito cierre de laboratorios y la poca producción de los que aún están activos son las razones esgrimidas por los expertos a la hora de justificar la ausencia de fármacos.
“En Venezuela la producción de medicamentos es prácticamente nula. A los enfermos cada día les cuesta más conseguir sus tratamientos y eso es delicado”, soltó en días pasados el señor Andrés Cárdenas, administrador de farmacia y representante de Fefarven, cuando fue consultado por La Prensa.
Cárdenas considera necesario crear un plan de emergencia que permita rescatar la producción de los laboratorios y mostró su preocupación por las condiciones de vida a la que se exponen pacientes con enfermedades degenerativas como el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH). “Son esos pacientes (VIH) los que más sufren. Ellos no tienen cómo medicarse”, soltó.
Los antibióticos o los antirretrovirales para pacientes con VIH no son los únicos que escasean en las farmacias larenses.
Pacientes con enfermedades crónicas como hipertensos o diabéticos también sienten los embates de una crisis sin precedentes. “Lo más triste es que nuestros enfermos seguirán muriendo”, dijo.
El equipo reporteril de La Prensa hizo un recorrido por 10 droguerías y farmacias y en ninguna encontró antibióticos.