A. Reyes / C. Linárez | LA PRENSA.- Representantes y docentes del colegio Montessori, en compañía de miembros de la organización Padres de Lara y Funpaz, protestaron frente al colegio, para exigir respeto a las instituciones educativas y solicitan a Mirna Víes, directora de la Zona Educativa de Lara, que cese el acoso a colegios privados.
La protesta tuvo lugar luego que el jueves fueron víctimas de la represión por parte de la GNB cuyos funcionarios lanzaron una bomba lacrimógena hacia el interior del plantel.
María Méndez, docente de la institución, asegura que todos los días supervisores se instalan en el recinto educativo para verificar que se estén desarrollando las actividades académicas, sin importar el peligro que corren los estudiantes ante la presencia de la Guardia nacional.
Asegura que, muchos representantes decidieron no llevar a los niños a clases por temor a que la GNB vuelva a arremeter en contra de la institución, por lo que piden respeto a la decisión de los padres de resguardar la integridad de los representados.
“¿Cómo mandamos a los niños a clase si hay protestas a diario?”, dijo, con mucha indignación Onaimi Lara, madre de un estudiante de 16 años de edad que fue detenido por la GNB y que gracias a la mediación de Funpaz fue puesto en libertad.
Otros ataques
Luis Arroyo, presidente del Colegio de Profesores del estado Lara, rechazó lo sucedido el pasado jueves en el Instituto Montessori. Denunció que durante la semana también fue atacado el Instituto Diocesano y el Colegio María Santísima, ubicado en Cabudare.
Arroyo también se pronunció ante lo sucedido en dos oportunidades en la Unexpo, la cual fue atacada por funcionarios de la Guardia Nacional y presuntos paramilitares, quienes causaron grandes destrozos a esta casa de estudio, violando la autonomía universitaria. Condenó las acciones de los funcionarios y las tildó de desmedidas.