Leidi Reyes | LA PRENSA DE LARA.-& ;La falta de dinero y tiempo son algunas razones por las que muchos padres se cohíben de brindar espacios de recreación para sus hijos. Sin embargo, en medio de las limitaciones hacen el esfuerzo para compartir un momento agradable y reforzar sus vínculos afectivos.
Wilianny Giménez, madre de dos hijas de ocho años, afirma que los más pequeños deben tener un espacio para estudiar y otro para divertirse. Confiesa que para ella y su esposo es complicado por los estrictos horarios de trabajo y por los altos costos que deben pagar para llevarlas a un lugar de recreación.
En un recorrido realizado por el Diario La Prensa de Lara, se pudo conocer que los precios de algunos parques de diversión en centros comerciales oscilan entre 12 a 15 dólares. Las entradas al cine cuentan $5; y la del zoológico en $2.
Por eso, Jhonny Monasterios, vendedor informal, revela que debe disponer de hasta $20 como mínimo para salir con sus nietas. «Cuando las veo tristes en la casa intento sacarlas, aunque sea una vez al mes; a excepción de cuando las ventas están bajas. Pero aun así, hago el sacrificio para que pasen un día diferente, así sea en su cumpleaños o en los días especiales«, admite.
María Carrasco, psicóloga, explica que compartir un tiempo de recreación va más allá de llevar a los niños a un lugar donde puedan jugar, sino que está relacionado con que los padres se pueden involucrar en esas actividades.