Apostados a las afueras del Liceo Lisandro Alvarado, en la carrera 15 entre calles 32 y 33 de Barquisimeto, lugar donde se están haciendo trabajos de construcción y con disponibilidad de empleos, albañiles hacen cola para introducir el currículo y poder tener un medio de vida, aunque sea por un corto lapso de tiempo, ya que la baja demanda de contratos los ha obligado a tener que dedicarse al comercio y en la mayoría de los casos a emigrar a otro país para brindar calidad de vida a sus familias.
José Alvarado, representante del Sindicato de la Construcción del estado Lara, afirma que al menos 700 albañiles habrían salido del país en lo que va de 2024 con destino a países como Colombia y Perú, donde hay la mayor plaza de trabajos de toda Sudamérica, mientras que los pocos que quedan han logrado mantenerse en el sector y otros vender chucherías en las calles de Barquisimeto, entretanto hacen un capital que les permita montar su propio negocio.
Según el sindicato, más de 3.000 personas en Lara practican el oficio; sin embargo, sólo un poco más de 2.300 están activos en la entidad.
Ezequiel Rodríguez es un albañil con trayectoria de más de 40 años que aprendió del oficio desde muy joven, por lo que gran parte de su vida se ha dedicado a ejercerlo, afirma que luego de la pandemia por covid-19, las oportunidades de trabajo disminuyeron mucho, por lo que ha tenido que buscar otras fuentes de ingresos en las calles para poder subsistir en el país.
«Es bastante fuerte, gran parte de mi vida trabajé y saqué adelante a mi familia con mi trabajo como albañil y ahora cada día el pensamiento se me nubla con sólo pensar qué debo hacer para seguir sosteniendo mi casa, emigrar no está en mis planes porque ni siquiera familiares tengo fuera. Es bastante fuerte la situación nuestra», afirmó Rodríguez.
Por su parte, el albañil Jesús Rodríguez no descarta tener que irse del país a nuevos rumbos. «Ya que no hallo qué otra cosa hacer cuando mi fuerte es en la construcción», siendo estos casos los que más se replican en el sector, debido a la paralización de obras civiles en la ciudad.
La tarifa por los trabajos, de construir o hacer mantenimiento a paredes y techos, pueden estar entre los 20 a $40 la jornada y los trabajos grandes superan los $60. Del gremio de albañiles, los consultados prefieren trabajar por cuenta propia, ya que no ven ninguna diferencia en pertenecer o no al Sindicato de Construcción porque no les brinda seguridad de tener empleo fijo.