Ana León | La Prensa-. En una época no muy lejana, los negocios de comida rápida sem veían repletos de gente desde el jueves hasta el domingo. Actualmente, lo que se observa al pasar por esos locales es a uno que otro cliente comiendo el plato que le “cuadre” con el bolsillo, pues los precios se han elevado de tal manera, que algunos han dejado de comer sus “asquerositos” los fines de semana.
“Gente que antes venía 2 veces a la semana, ahora viene 1 o 2 veces al mes. Si acaso en las fechas de quincena”, así lo expresó Antoin Tirouz, dueño de uno de los trailers de la calle del hambre de Patarata.
Alejandra Lima, dueña de un local en el Complejo Ferial Bicentenario, indicó que “el trasfondo de toda esta situación está en la situación económica del país”, pues los
precios de los ingredientes sen incrementado a tal punto que han tenido que aumentar los precios de las comida.
Anais Méndez, dueña de un trailer de Patarata, comentó que hace dos semanas el galón de mayonesa “bachaqueado” lo compraba en Bs. 4 mil 600 y “de 15 días para acá subió a 15 mil bolívares de un sopetón”.
Méndez señaló que los ingredientes como el pan antes lo compraban Bs. 500, ahora si les llegan a vender lo compran en Bs.1.350, el aceite que antes lo conseguían en Bs.1600 ahora les puede llegar a costar hasta Bs. 45 mil.
Esto hace que se eleven los costos y disminuyan los clientes. Para mantenerlos, algunos locales implementan los “combos” o promociones. Con la finalidad de dar un
precio global y mas accesible para el bolsillo de los venezolanos.
Anais Méndez manifestó que es difícil trabajar con combos porque no se maneja el margen de ganancia real, sino que uno maquilla los precios para poder obtener clientes, eso hace que “la semana siguiente sea muy difícil adquirir nuevamente el producto y por consecuencia no obtengamos ganancias”.
Para Antoin Tirouz la situación se ha tornado tan difícil que está pensando seriamente en cerrar el negocio por un mes. “Para ver que va a pasar con el país y ponerme a trabajar de taxista”.