Osman | LA PRENSA.- Marcos Villafañe es chofer de un autobús y regularmente desde hace más de 10 años, pasa todos días por el puente sobre la quebrada La Ruezga y no puede ignorar los huecos que hay a la mitad del puente. “En cualquier momento, con un temblor y una fuerte crecida de la quebrada, esto puede venirse abajo”, piensa.
El pensamiento de Villafañe es el reflejo del deplorable estado en el que se encuentran los puentes y distribuidores de Barquisimeto pues la presencia de huecos, fallas estructurales, bases socavadas, montones de basura y maleza hacen que su vida útil se acorte cada vez más.
Según Julio César Gutiérrez, presidente encargado del Colegio de Ingenieros del estado Lara, el 90 por ciento de los puentes en el estado no tienen un mantenimiento adecuado ni son inspeccionados por el Ministerio de Infraestructura.
“Aquí en el estado Lara existen unos 300 puentes, pero no se ha hecho mantenimiento a pesar que en 2013 el Colegio de Ingenieros de Venezuela levantó un informe en el que se le alertó al presidente que habían más de 3 mil puentes en el país que estaban en franco riesgo”, explica el ingeniero.
Gutiérrez detalla que las principales causas para el mal estado de los puentes, además de la falta de mantenimiento, es la acción de las chaparrones de agua durante la época de lluvias en el país que producen erosión- y el nulo control sobre los vehículos de carga pesada que transitan en tanto en avenidas como en puentes y distribuidores.
“Mientras no se controle a los vehículos que cargan más de 39 mil toneladas y pasan constantemente por puentes, pone en riesgo de que se caiga, incluso si está construido con los mejores materiales en el mercado”, señala.
El ingeniero hace énfasis en tres puentes de la ciudad que son los que tienen los peores pronósticos, especialmente durante la actual época de lluvias torrenciales. “Santa Rosa, Guardagallos y La Guardia. Hay que estar pendientes de ellos”, afirma.
Tras un recorrido realizado por el equipo reporteril de La Prensa en ocho puentes y distribuidores de la ciudad de Barquisimeto o Cabudare, se pudo comprobar el grave estado al que se refería el ingeniero Gutiérrez.
En el caso del puente Guardagallos, ubicado en el comienzo de la autopista Cimarrón Andresote, tiene una batea grande en el pavimento sentido Barquisimeto-San Felipe por las que los carros evitan pasar. Además las barandas de ese puente están dobladas y a punto de caer al vacío.
También está el puente que se ubica en Santa Rosa, cuya infraestructura presenta en bases y vigas numerosos huecos, grietas y hasta raíces de árboles. El paso peatonal en ese puente si bien se encuentra en riesgo porque algunas de las barandas están dobladas.
La situación de los puentes resulta preocupante para consultados, quienes mencionan que el mejoramiento de puentes y vías debería ser prioridad para el gobierno regional y nacional.
“Hasta que no ocurra alguna tragedia con un puente aquí o en otro lado, no se van a tomar las medidas pertinentes”, puntualiza el señor Eduardo Álvarez.