Durante los cinco meses de este año escolar, la enseñanza pública ha tenido un panorama difícil
Redacción | LA PRENSA DE LARA.- La escasez de docentes en la educación pública, así como la exigencia de un ajuste de salario y una buena infraestructura escolar son condiciones que están afectando a la educación venezolana en los últimos seis años. Sin embargo, desde que inició el año escolar 2023-2024 se ha venido agravando y el gremio docente manifiesta estar muy preocupado porque no ven mejorías.
Luis Arroyo, presidente del Colegio de Profesores del estado Lara, calificó que la educación en Venezuela tiene un panorama complicado, tomando en cuenta que continúan los conflictos laborales que a su vez hacen que los profesores dejen las instituciones educativas porque no tienen un buen salario ni un espacio de trabajo adecuado para impartir las clases, afectando así el rendimiento y avance de los estudiantes.
Arroyo precisó que desde que inició el año escolar 2023-2024 están aplicando el horario mosaico o también conocido como flexible, por lo que los profesores sólo asisten a las escuelas y liceos un máximo de tres días a la semana, lo que no permite darles a los estudiantes un seguimiento de los contenidos. A pesar de que buscan estrategias, como el monitoreo a través de WhatsApp y mantienen la comunicación, pero aseguran que el cara a cara es indispensable.
«La educación pública está en retroceso y eso preocupa mucho al gremio, porque afecta directamente al estudiante«, dijo Arroyo puntualmente en asignaturas como matemáticas, física y química, además de inglés y castellano que, según datos del Sindicato de Trabajadores de la Educación del estado Lara (Sutelara), la falta de profesionales en esas materias ronda en un 50%, tanto a nivel nacional como en Lara.
En cuanto a la parte de infraestructura, continúan las carencias de una buena planta física (paredes, techos, puertas) y hasta limpieza de maleza y dotación de insumos de limpieza, lo que hace que los espacios no sean acordes para las clases y durante las lluvias han tenido que suspender actividades.
Laura Igarra, presidenta del Colegio de Licenciados en Educación, calificó como lamentable que no haya solución para los problemas que hay en la educación pública venezolana. «Y el sistema está atrasado«, por lo que la preocupación mayor es el nivel de preparación que están teniendo los alumnos, pero además las renuncias de los educadores porque no han recibido un ajuste de salario. Sin embargo, el gremio se mantiene en la lucha y exigencia de mejoras a las autoridades.