Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- Un total de 497 días en cierre técnico tienen los hoteles y posadas localizados en las 10 parroquias del municipio Iribarren. Prestadores de servicio turístico indicaron que están en un abismo desde que inició la pandemia, y aunque hace 2 semanas fue abierto el Aeropuerto Internacional Jacinto Lara, el sector no tiene expectativas de mejoras porque aún no cuentan con un plan aprobado por el Gobierno para reactivar operaciones, por lo que dan por perdida la temporada de vacaciones escolares.
Unos 9000 trabajadores de turismo en Barquisimeto han quedado desempleados el último año, de un total de 15 mil empleos directos que contabilizaba la Cámara de Turismo del municipio Iribarren, lo que representa una reducción de nómina del 60%, según lo informó su presidente Ernesto Ibarra. Desde gerentes con estudios internacionales, licenciados en turismo, técnicos medios, chef, camareras y recepcionistas han tenido que migrar del país o dedicarse a la economía informal para sobrevivir.
«Durante toda la pandemia muchos sectores económicos pudieron trabajar. Los que no eran prioritarios lo hacían a escondidas, pero si un hotel abría era multado y si alguien osaba a sacar un viaje a algún destino turístico de Iribarren corría el riesgo de ser detenido», resaltó Ibarra, indicando que la ocupación hotelera es de apenas 3%.
«En Carnaval y Semana Santa hubo flexibilización, pero la demanda la absorbió Margarita que tuvo un 35% de ocupación, que tampoco significó una activación, apenas eso les alcanzaría para cubrir gastos de servicio», expresó.
Solicitaron una reunión con el gobernador de Lara, Adolfo Pereira, porque ven con preocupación que aunque hablan de un plan para el turismo poscovid, sólo han visto inversión destinada al turismo público, pintando plazas y los parques temáticos el Mundo de los Niños o el Bosque Macuto, pero no hablan de aprobar créditos para que el sector privado pueda arrancar.
«La gobernación sólo cuenta con un hotel, Hostería El Obelisco, sólo tiene dos establecimientos públicos de alimentos y bebidas y no tienen transporte especializado en turismo. El 98% del sector está en manos de privados, por eso debemos ser tomados en cuenta», exclamó.