Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.-& ;Se habla de rock y tiende a asociarse con el estruendo que acelera el corazón y sacude el cuerpo. Pero sus diversos estilos pueden ofrecer ese toque terapéutico en niños del espectro autista y en la población neurodiversa. Así se disfrutará mañana con una tarde diferente que fue bautizada como «Rocketea», en la pizzería Pertutti, en Palavecino.
La avenida La Mata desde las 2:00 pm será el epicentro en este concierto gratuito que busca visibilizar el autismo, tal como lo señala Luis Fernando Márquez, quien participa y colabora con el equipo organizador. Un escenario que vibrará con el repertorio propio y versiones de las bandas «Formas«, «Metanioa«, «Adagio» y «Sonática«. Todo un recorrido desde los clásicos del rock hasta esas tendencias actuales y que también incluye a músicos neurodiversos.& ;
«Se tienen agrupaciones mixtas con alumnos que tienen alguna condición, pero se desarrollan desde la música», precisa Márquez, quien es profesor en el conservatorio Vicente Emilio Sojo y miembro de «Sonática», una banda con ese nombre momentáneo y que tiene previsto interpretar aproximadamente 6 temas. «Estos jóvenes buscan su espacio y así demostrar que superan ese prototipo urbano», señala ante la necesidad de impulsar el rock, que siempre encasillan con aires rebeldes.
Cuando Marlys Coroba, especialista en educación especial y terapeuta en la Fundación «Sólo faltas tú», explica la importancia de la música y recuerda que las personas neurodiversas tienen una entrada neurológica diferente a la nuestra, todo en función de su ser. En ellos varía la perspectiva auditiva y de acuerdo al estilo, no altera sino que les permite drenar. «El cuerpo tiene armonía, así como los tiempos y melodías en la música», recalca y toma referencia del rock, aquel más antiguo que suele imponer ese sonido de platillos y éstos marcan un compás que puede ser de gran provecho para niños con espectro autista. Según Coroba, con este tipo de estímulos se segrega mayor cantidad de serotonina, conocido como ese neurotransmisor que tranquiliza los nervios y permite bajar el nivel de ansiedad, compulsividad y hasta agresividad, en determinados casos. Precisa que pueden generar ese efecto de calma que tranquiliza a este tipo de conductas. Recuerda que se trata de una diversidad, pero con necesidad de inclusión y con una verdadera integración. Niños o adultos con toda la disposición de estar atentos a la música, cuando en la cotidianidad se reconocen por movimientos involuntarios y hasta hipersensibilidad al tacto. Las ondas sonoras tienen ese poder desde la musicoterapia, incluso con canciones de ritmos que activen el sistema nervioso central, sin perturbar. «Ellos necesitan esa energía y la asumen como armonía«, expresa del beneficio que incita la conexión correcta, bajo la sintaxis del cerebro y el perfecto compás de las ondas sonoras.