viernes, 31 enero 2025
viernes, 31 enero 2025

Vecinos del barrio Santo Domingo viven entre mal olor y aguas negras

Daimar Díaz | LA PRENSA DE LARA – Habitantes del barrio Santo Domingo sector Colinas de Navarro, que reúne unas 180 familias, han tenido que lidiar con malos olores y aguas negras luego del colapso de las cloacas hace tres años.

Las fétidas aguas que inundan las calles por el colapso de las tuberías de aguas negras, ahora también se han adueñado de las viviendas, pues luego del aguacero registrado en la ciudad el pasado jueves las cloacas se taparon causando que se regresaran las aguas servidas por los inodoros y lavamanos.

«Con el palo de agua de la otra semana las tuberías de aguas negras se taparon más y cuando usamos el baño se desbordaron las pocetas e inundaron todo el baño de agua sucia, y nuestro mayor temor es que cuando vuelva a llover no sea sólo el baño el que se inunde sino toda la casa», comentó Eukaris Aranguren.

Aranguren dijo que sus dos pequeños han tenido enfermedades en la piel a raíz del bote de aguas negras, expresando que en varias oportunidades han asistido hasta la sede de Hidrolara a solicitar el mantenimiento de las tuberías, pero no han sido atendidos, por lo que decidieron acercarse nuevamente, pero esta vez con carteles para ejercer una protesta pacífica que los ayude a ser tomados en cuenta.

Por su parte la señora Antonia Mendoza comentó que esas tuberías presentan un tapón que debe ser removido con maquinaria pesada, apoyo que sólo puede brindar la hidrológica regional, pero hasta la fecha no saben si podrán contar con la anhelada ayuda.

«Los vecinos no podemos hacer nada, pedimos ayuda», añadió.

 

Noticias relacionadas

No te pierdas

Lara entre los estados con mayor incidencia en siniestros viales según PNB Tránsito

Un golpe en la cabeza y una fractura en el hombro dejaron adolorido a Clerman Morales, un soldador de 43 años, tras chocar su moto contra un vehículo Twingo, color gris en la carrera 18 con calle 26 de Barquisimeto, el día martes 28 de enero. 20 minutos después, otro motorizado caía ensangrentado en la avenida Venezuela con calle 26. Ese día, un funcionario de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) que iba en motocicleta falleció tras ser arrollado en la redoma del Monumento al Sol Naciente a las ocho de la noche. Todos siniestros viales tuvieron algo en común: el exceso de velocidad y la imprudencia al no respetar la Ley de Tránsito Terrestre al conducir.

Redes sociales