Habitantes y comerciantes de la carrera 19 entre calles 14 y 15, al este de Barquisimeto, llevan más de 45 días padeciendo con las limitaciones de solo una fase eléctrica, tras la explosión de uno de los transformadores que afecta a 17 familias y gran parte de establecimientos. Esta situación castiga a 23 adultos mayores encerrados, sin poder contar con el ascensor, deficiencias con el suministro de agua y tener que sustituir el aire acondicionado por ventiladores.
La situación es más incómoda para estos adultos mayores residentes en la Torre Venezolana, de 17 pisos, pues no pueden usar el ascensor. «Algunos hasta perdieron citas médicas por lo difícil para bajar las escaleras», señala Ramón Alvarado, sabiendo de un señor con problemas de movilidad que tardó más de 30 minutos en bajar ocho pisos, aun con la ayuda de terceros.
Desesperados
Niurka Ledezma, propietaria de un comercio, dice que los agobia la desesperación porque se formuló la denuncia en Corpoelec, pero el organismo no cuenta con un transformador 50 Kva para la reposición. Vecinos han realizado el reclamo por la aplicación VenApp, pero sólo han recibido llamadas telefónicas de la sala situacional para corroborar si continúan con el problema.
«No podemos darnos el lujo de bajar las santamarías porque tenemos nuestros compromisos», se lamenta Ledezma, al relatar lo incómodo del personal que siente fatiga en la vista por trabajar a media luz, así como el nerviosismo por usar el baño, sabiendo las limitaciones que tienen con la bomba hidráulica. Cuenta que la semana pasada un negocio se vio obligado a cerrar sus puertas por la falta de resistencia eléctrica para la operatividad de sus equipos.